"Nos vamos muy fastidiados. Perder contra el Madrid puede entrar en los planes, pero no poniéndoselo tan fácil desde un principio". Jony lamenta que el Sporting no fuera ante el Madrid el habitual equipo con garra y mordiente. Un motivo en el que encuentra algunas de las claves del abultado marcador al descanso. "Los dos primeros goles del Madrid nos mataron. La cabeza no nos iba. Llegábamos tarde a la presión, dejamos jugar al rival muy cómodo y lo pagamos", explica.

El vestuario rojiblanco se queda con la imagen vista tras el descanso como la fórmula que deben aplicar para poder conseguir poner freno a la mala racha de resultados y salir de los puestos de descenso. "Abelardo nos pidió en el descanso que fuéramos nosotros mismos, que sabíamos hacerlo. La gente salió sin ningún tipo de presión, porque el resultado ya era abultado. A peor no podía ir. Se vio un Sporting mejor", señala Jony. Reconoce que caer de esta forma duele, pero considera que los rojiblancos deben pensar ya en el duelo ante la Real. "Hay que cambiar el chip y pensar ya en el encuentro del viernes. Tenemos que ganar. El camino está en la intensidad que ofrecimos en la segunda parte. Hay que intentar repetirlo", concluye el cangués.