112 años de vida contemplan a una Sporting que ayer, 1 de julio, celebró su aniversario en torno a una de las figuras que marcó su nacimiento: Anselmo López. La asociación que lleva el nombre del primer presidente y promotor de la creación del club ha convertido ya en tradición la ofrenda floral realizada ante su tumba, en el cementerio de Ceares. Un gesto que estuvo capitaneado por dos históricos rojiblancos y símbolos de la mejor época de la entidad: Quini y Cundi.

"Es una iniciativa con la que honramos a la persona que creó nuestra mayor pasión", explica Roberto Narváez, miembro de la asociación "Anselmo López". Es el cuarto año que se juntan ante la tumba del fundador del club, cuya lápida luce mejorada después de que ellos mismos participaran en su rehabilitación. La ofrenda floral que se dedica a la memoria del considerado padre del sportinguismo contó en esta ocasión con la participación de diferentes componentes de la afición.

A la presencia institucional del Sporting, encabezada por Quini y Cundi, se sumaron la de colectivos como la Unión de Peñas Sportinguistas, Unipes, así como otras peñas como La 1905, Pumarín e incluso hubo representación de la que tiene El Brujo en Barcelona. La entidad rojiblanca recordó también la efeméride, a través de la página web, con un pequeño resumen de cómo se dató el nacimiento del Sporting y de los primeros pasos de la entidad.

La asociación "Anselmo López" también consiguió este año ver materializado uno los objetivos por los surgió: la creación de un busto que recordara la figura del propio Anselmo López en El Molinón. El proyecto, después de años intentando encontrar apoyos y financiación, ya integra una de las zonas más simbólicas del municipal gijonés, la situada ante los vestuarios. El próximo paso es el de poder crear un paseo de la fama en torno al campo que recuerde a otras figuras del club.