Hassan reina en la Copa y eleva al Sporting (0-3)

El equipo asturiano termina goleando al Guijuelo y se clasifica para la siguiente ronda tras una exhibición del francés, al que le bastó apenas media hora para marcar las diferencias

Andrés Menéndez

Andrés Menéndez

El Sporting se siente tan agraciado que hasta en los días menos lúcidos es capaz de golear. Empujado por su dinámica ganadora, el equipo rojiblanco salió airoso de una parada nada sencilla como Guijuelo al vencer a los locales (0-3). Los condicionantes afearon el juego y provocaron que el resultado pendiese de un hilo hasta que apareció Hassan. Un virtuoso hasta en los campos más modestos como el césped sintético del Municipal Luis Ramos. La exhibición del francés fue tal que en apenas media hora marcó un golazo y regaló el mejor día de su vida al debutante Marcos Fernández.

0
Guijuelo
3
Sporting
0-1, min 58: Parga, en propia meta. 0-2, min 66: Hassan. 0-3, min 85: Marcos Fernández
Guijuelo
Rabanillo; Alberto Bernardo, Parga, Pica, Asiel, Coque; Cristóbal, Diego y Willy; Toti y Garban
Cambios

Ibra por Coque, min 69. Juan Antonio pro Diego, min 69

Sporting
C. Joel, Rosas, Izquierdoz, Diego Sánchez, Pablo García; Queipo, N. Martín, Varane; Jeraldino y Djuka
Cambios

Coto, por Guille Rosas, min 62. Hassan por Queipo, min 62. Marcos Fernández pro Djuka, min 75. Rivera por Nacho Martín, min 75. Lozano por Villalba, min 86.

Árbitro: López Toca. Amonestó al visitante Izquierdoz

La eliminatoria adquirió en seguida una relevancia mayúscula para Guijuelo. La Mareona primero agotó las existencias hosteleras de una localidad especialmente popular por la riqueza de su jamón. Mientras que Mario Sánchez, el técnico de un club modesto que hoy lucha por ascender a Primera RFEF, entendió el encuentro como algo excepcional: todos los habituales fueron ayer titulares a la vez que el equipo se abrigó en torno a una defensa de cinco con tres centrales y dos carrileros largos para hacerle partido a un Sporting rodeado de novedades. Ramírez agitó con fuerza el árbol para evitar fatiga entre los gladiadores que ganaron al Espanyol y con una parte de sus pensamientos mirando a la visita del sábado al filial del Villarreal. Pero dio también dimensión al envite copero. No había entre los titulares ni uno solo de los cuatro jugadores del Sporting Atlético. Y sobre el césped de hierba sintética estaban a la vez dos de los capitanes y fichas más importantes del grupo como Cali Izquierdoz y Djuka. La principal novedad estaba en la presencia de Ignacio Jeraldino haciendo binomio con Djurdjevic en un movimiento que arrinconaba a la banda izquierda a un futbolista más elegante que físico como Villalba. Diego Sánchez, mientras, se reciclaba al puesto de central.

 La lluvia no cesaba de golpear sobre la hierba sintética del Municipal Luis Ramos. El agua se acumulaba en los costados con el paso de lo minutos lo que ralentizaba el juego. Las condiciones dificultaban las circulaciones largas de los futbolistas rojiblancos, pero la adversidad también espoleó a los del Guijuelo, que no se sentían tan expuestos cediendo el dominio y buscando correr. El fútbol solo adquiría sentido en largo. Y ahí los de verde tenían hormigón con la zaga de tres formada por Parga, Pica y Asiel. Los de Ramírez mandaban envíos demasiados horizontales hacia Djuka y Jeraldino, pero estaban en inferioridad. Y en las bandas ni Queipo ni tampoco Villalba eran capaces de vencer por fuera. Jeraldino de falta e Izquierdoz con un remate a balón parado fueron los únicos que incomodaron al meta gijonés del Guijuelo Rabanillo. El encuentro estaba cogiendo un color que no le gustaba nada a Ramírez, en su regreso a la competición que le vio estrenarse como técnico del Sporting. El preparador canario negaba con la cabeza mientras movía a sus jugadores para buscar posiciones ventajosas: Villalba y Queipo se intercambiaban de banda, e incluso se metían en ocasiones hacia dentro para dejar más espacio por fuera para Guille Rosas y Pablo García. El partido se fue 0-0 al descanso y el segundo tiempo comenzó con una tromba de agua espectacular. Y el encuentro de repente cogió otra velocidad. Coque obligó a intervenir a Christian Joel. Y después Pablo García estuvo a nada de encontrar un aliado en una incursión por la banda. Las transiciones y llegadas pasaron de ser residuales a habituales y en ese corre calles resolvió el Sporting. Guille Rosas sacó un centro durísimo que conectó contra su voluntad Parga tras golpear antes en Asier para superar a Rabanillo. El 0-1 envalentonó primero al Guijuelo que buscó hacerle cosquillas a Joel a través de varios centros. Pero el meta cubano, siempre osado, ganó todas las aventuras por alto. Los locales seguían soñando con alargar la eliminatoria hasta que Ramírez llamó a Hassan. El francés tardó un par de minutos en demostrar que es especial. Tocado por la varita, se fue de su par en la banda y puso un centro chut que se metió por la escuadra. El azar sonreía al equipo gijonés. Y la Mareona enloquecía en la grada. De otra arrancada del galo llegó el 0-3 del debutante Marcos Fernández, que llevaba unos minutos en el campo. El guaje remató a la red un regalo. El show de Hassan animó los minutos finales donde el resultado pudo ser incluso más abultado. Lozano tuvo el 0-4. También Joel demostró sus reflejos a disparo de Ibra. La emoción de la Copa duró hasta la entrada de Hassan. Los nervios se llevaron por delante al entrenador local. Mario Sánchez fue expulsado. Ramírez tuvo que calmarlo.

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