Pedro Rocha sienta en la misma mesa a Sporting y a Oviedo, que apunta a ser subsede

El presidente de la Española, con clubes y miembros de la Asturiana, disfrutó de calamares y lubina en una cita distendida de hora y media

Andrés Menéndez

Andrés Menéndez

Sporting y Oviedo compartieron ayer mesa y mantel en Gijón junto a Pedro Rocha en La Nueva Zamorana, tal y como desveló LA NUEVA ESPAÑA en exclusiva. En la jornada más importante para la candidatura de El Molinón para ser una de las sedes del Mundial 2030, la comida de los dos gigantes del fútbol asturiano con el presidente en funciones de la Federación Española de Fútbol brindó una imagen de absoluta unidad. En el almuerzo no se profundizó mucho sobre el proyecto mundialista de El Molinón -sí hubo alguna referencia sobre el impacto que podría tener la celebración del evento deportivo en Asturias-. Se abordaron más otros temas, en un encuentro cordial. 

Aunque en otras conversaciones que se han mantenido entre entidades se desprende que el Real Oviedo está por la labor de entrar y sería -si todo avanza- una de las dos subsedes, según apuntan fuentes consultadas. Faltaría mucha tela que cortar. Las subsedes, en cierto modo, han entrado en juego en este momento de la carrera mundialista. De hecho, emisarios de la RFEF ya han visitado algunas candidatas. Si todo avanza, el Oviedo podría ofrecer la ciudad deportiva de Latores, con la que espera contar para esas fechas. Pero falta mucho camino. Entre otros asuntos: la certeza de que se conseguirá la financiación.

La cumbre de La Nueva Zamorana duró en torno a una hora y media, entre una cosa y otra. Los presentes degustaron algunos entrantes especialidad de la casa, y después tuvieron para elegir entre una lubina del Cantábrico o calamares. Joaquín Alonso fue el encargado de recibir a Agustín Lleida, director general del Oviedo, y Martín Peláez, presidente del club azul, a las puertas del restaurante. A la entrada del local también acudió José Ramón Cuetos Lobo, presidente de la Federación Asturiana. Todos se dieron un afectuoso abrazo. Dentro esperaban David Guerra, Pedro Rocha, María Tato y Pablo Menéndez, mano derecha de Lobo. La prontitud de la cita que tenían después tanto los promotores de la candidatura como los miembros de la Federación en el Ayuntamiento, programada para las 16 horas, impidió que la sobremesa fuera más larga, aunque se estiraron los tiempos al límite.

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