Una mujer de 47 años falleció ayer en Valls (Tarragona) apuñalada por un hombre que posteriormente se entregó en la comisaría de la Policía Local de esa localidad.

Según fuentes próximas a la investigación, la mujer era una prostituta de nacionalidad rumana que acudió a realizar un servicio a casa del homicida, un cliente habitual de 39 años y de la misma nacionalidad que se había encariñado con ella. Ambos entablaron una fuerte discusión y el detenido apuñaló a la mujer. Tras los hechos, y poco antes de las 03.00 horas, el hombre fue a la comisaría de la Policía Local y confesó el crimen.

Este fue el tercer homicidio en Cataluña este fin de semana, después de que un hombre muriera a manos de su novio en Sabadell (Barcelona) y una mujer matara a su marido en Barcelona.