Los vecinos de Noreña y más aún los trabajadores de la fábrica cárnica Delclós se llevaron ayer un buen susto a cuenta del incendio que se produjo en la chimenea de la factoría. Los empleados, alarmados por el humo negro que salía por la chimenea, estuvieron hábiles para actuar a tiempo y lograron sofocarlo con los extintores antes de que llegaran los servicios de emergencia. Los bomberos se aseguraron de que el incendio estuviera completamente apagado y de que no hubiera riesgos. Hasta lugar del incidente acudió también la Policía Local de Noreña, informa M. MENÉNDEZ.