La decisión municipal de sacar de las aceras de Gijón a los usuarios de bicicletas y patinetes -algo muy demandado por los peatones en los últimos años- se ha cobrado ya su primer incidente después de que el conductor de un vehículo atropellase intencionadamente, según los testigos, a un joven en patinete con el que mantuvo una discusión de tráfico en la calle de Ramón y Cajal. Este individuo, de 57 años, acabó detenido por un delito de lesiones y otro contra la seguridad vial puesto que dio positivo en la prueba de alcoholemia practicada luego por los agentes.
El incidente tuvo lugar pasadas las ocho de la tarde. Según los presentes, entre ellos un conductor de un autobús municipal, todo se originó por una discusión entre el joven herido y el ahora detenido, que responde a las iniciales V. M. N. G. y es vecino de Gijón. El conductor del coche comenzó a increpar al joven herido -y también al amigo que iba en otro patinete- justo en el momento en el que ambos le habían pasado para detenerse delante de su vehículo en un semáforo en rojo en el cruce de las calles Ramón y Cajal y la calle Balmes.
En ese momento, confirman fuentes de la Policía Local, este individuo comenzó a gesticular airadamente y a increpar a los jóvenes. Justo después pisó el acelerador y cuando el semáforo se puso en verde comenzó con acelerones y frenazos como amagando con arrollar a uno de ellos, algo que finalmente ocurrió, tal y como recogen las cámaras de tráfico instaladas en esa vía de entrada a Gijón.
Con el relato de los testigos, la Policía Local tomó declaración al conductor del vehículo y autor del atropello, que arrojó 0,6 miligramos por litro en la prueba de alcoholemia y es por ello que acabó detenido. Ahora se le imputa un delito de lesiones y otro contra la seguridad vial, de los que deberá responder ante el juez. Hasta el lugar del accidente también se desplazaron los sanitarios para atender al herido, E. J. M. G., que acabó trasladado en ambulancia hasta el Hospital de Cabueñes con traumatismos leves.
El Ayuntamiento de Gijón tomó la decisión de intensificar el control de las infracciones que cometen quienes circulan en patinete eléctrico o bicicleta por las aceras el pasado mes de julio ante la cantidad de usuarios de estos medios de transporte que dificultaban el día a día a los peatones en determinados puntos de la ciudad. Fue a partir del 27 de julio cuando la Policía Local, tras varios días de concienciación, comenzó a sancionar estos comportamientos.
