Adiós a Pablo Díaz en Pasapalabra: el sustituto de Moisés pierde su sitio en el concurso y deja la silla azul vacía

Pasapalabra ha dado una vuelta de tuerca que ni el propio formato se esperaba. La ausencia repentina de Moisés, que ya suma tres programas sin poder hacer acto de presencia por cuestiones personales, ha traído de vuelta a uno de los rostros más icónicos de este concurso que ya ha pasado por dos cadenas diferentes a lo largo de su historia: Pablo Díaz.

Victoria sorpresa en Pasapalabra tras la llamativa baja: gana el rosco en su primer día de participación y se lleva el bote

Este histórico de la televisión ganó enorme popularidad tras llevarse a casa el bote; una hazaña al alcance de muy pocos. Su regreso ya se materializó en el especial navideño del formato, que también trajo de vuelta a otros concursantes de nivel como Orestes Barbero, pero ahora ha vuelto de sorpresa (incluso para él) para plantarle cara a Óscar.

No obstante, lo que hay en juego no es la millonada que han acumulado entre los dos concursantes, sino un bote más modesto de 100.000 euros. Sin embargo, esto deja unas cuantas preguntas en el aire: ¿Qué pasa si uno de los dos cae en una silla azul?

Pasapalabra ha estado a punto de despejar esta duda tras el último patinazo de Díaz. La derrota del exconcursante en el programa anterior le puso contra las cuerdas en la silla azul, donde estuvo a punto de perder el puesto que custodia hasta el regreso de Moisés. Pablo se enfrentaba a Alejandro, un aspirante con ganas de arrebatarle el puesto a Díaz, pero los nervios le jugaron una mala pasada que le dejó sin comodines en las primeras tres palabras.

Y es que en el rosco del programa anterior, a pesar de contar con una amplia ventaja desde las primeras palabras, Pablo Díaz pinchó contra su contrincante y, tras firmar unas tablas, terminó quedando por debajo y condenó su puesto. No obstante, Díaz ha aguantado y continuará jugándosela contra Óscar hasta que uno de los dos se lleve el bote, o hasta que Moisés firme su regreso.