Gijón, María CAVIA

El talento asturiano se dio cita ayer en el gijonés hotel AC Los Ferranes atraído por el concurso de nuevas estrellas que organiza la TPA para su programa «La Gran Noche de Terapia». Un casting que después de varias ediciones en Langreo y en Oviedo se presentó por primera vez en Gijón. Los participantes sólo esperaban escuchar una frase: «Yes mundial». Era el pistoletazo de salida en el camino a la fama. Música, magia, baile, mucho humor y un jurado genial, al estilo «Factor X», que estuvo integrado por David Serna, periodista y crítico musical; Ángela Show, empresaria artística, y Alain Fernández, director artístico.

Los nervios se palpaban entre los participantes en la sala de espera y, sin embargo, no pareció que les pasaran factura, pues el nivel fue alto. Los concursantes que salían de actuar eran recibidos entre aplausos por sus compañeros de casting. Caras de alegría para los que regresaban a sus casas recibiendo un «yes mundial» y rostros de resignación entre aquellos que no tuvieron suerte.

Alrededor de cincuenta personas se dieron cita en este casting para demostrar sus habilidades. Aunque la mayoría eran talentos asturianos, el francés Pierre Aynie puso el toque internacional al concurso. Este polifacético galo es todo un showman y un experto en este tipo de concursos. Sus habilidades abarcan desde la composición hasta la doma de caballos. Pierre iba muy bien preparado e incluso se había vestido para la ocasión al estilo country. «Vengo a presentar mis composiciones. Para esta ocasión he elegido merengues y cumbias», comentó este francés afincado en Asturias.

Asnahan Medinet, que prefiere ser conocida con su nombre artístico, ofreció algo novedoso en un casting plagado de cantantes. Las danzas árabes son su especialidad y comenzó a practicarlas hace ocho años. Asnahan incluso no pudo esperar a estar delante del jurado y se arrancó a bailar para amenizar la espera a sus compañeros.

Arancha Miñán dejó boquiabierto al jurado demostrando su chorro de voz lírica con una pieza de una ópera. «Nunca he estudiado música. Canto en casa y en el trabajo y tengo fritas a mis compañeras», bromeó Arancha. «No sé qué haces que no estudias. Tienes una capacidad impresionante y te digo que yes mundial», le respondió David Serna. Y también muy sorprendido dejó al jurado Elías Llano, un joven piloñés de 22 años que canta, actúa y representa monólogos, todo con mucho arte. Al casting «Yes mundial» se presentó cantando una canción de Nino Bravo, pero, Alain Fernández, le hizo una petición especial: que actuase. A los miembros del jurado les gustó en cualquiera de sus facetas artísticas y no consiguieron ponerse de acuerdo con el estilo que más les había gustado, si como monologuista y actor o como cantante. «Puedo cantar en la mitad de un monólogo», comentó Elías para solucionar las discrepancias. Sin embargo, todos estuvieron de acuerdo en que era «mundial».

Aunque la mayoría de los concursantes se presentaron en solitario, también hubo parejas artísticas, como «Too Old to Die Young», una banda de rock alternativa integrada por David Martín y Miguel Ángel Quintana. Aunque es la primera vez que se presentan a este concurso, ya tienen tablas sobre el escenario. Este maratón del talento asturiano finalizó a las seis de la tarde después de horas cargadas de arte. Quién sabe si entre los participantes se encuentra alguna promesa que alcance el estrellato. Una frase fue la protagonista indiscutible de la jornada: yes mundial.