Miles de personas (hasta un millón en ediciones anteriores) franquearán a partir de hoy, y hasta el próximo día 19, el recinto de los antiguos astilleros de Naval Gijón. Es la cita con la "Semana negra", la gran referencia de los festivales españoles de literatura de género (de la novela policíaca a la histórica) y casi ya un clásico estival asturiano. El certamen, que después de veintiocho años sigue gozando de excelente salud pese a las itinerancias urbanas y las polémicas con voltaje, comenzó hoy con la llegada a la estación de Gijón del tren con los escritores, procedente de Madrid, y la recepción oficial en el Ayuntamiento. Por la noche, además, el primero de los conciertos programados, con "Vargas Blues Band".

La "Semana negra" se ha convertido, desde el año 2012, en el último y peculiar "buque" del viejo astillero. Las carpas, casetas e instalaciones (del escenario de las actuaciones musicales a la noria que recorta el perfil oeste gijonés), ocupan unos 36.0000 de los 52.000 metros cuadrados en los que se celebra un festival que, sin dejar de ser literario, es como un lúdico zoco por el que pasean familias al completo. Los asturianos y foráneos bendijeron el certamen desde sus dos primeras ediciones: en el segundo año sumó medio millón de visitantes.

El éxito concita en ocasiones extraños adversarios. Le ha pasado también a la "Semana", que sin modificar mucho sus fórmulas no ha conocido el desmayo. Muchos de sus críticos han acabado presentado sus libros bajo esas carpas blancas, entre las réplicas de los personajes de cómic, junto a las churrerías y al pie de la inevitable noria. Lo decía con ironía el coordinador de contenidos de la cita, Ángel de la Calle, al presentar esta vigésima octava edición: "Bueno, si no te gustan los libros, al menos te gustarán los bocadillos". Los horarios, con el frustrado intento del gobierno municipal de acortar la hora de cierre, centraron el pulso de este año. Seguirán igual, al menos este verano.

Hay quien afirma que el astillero de Naval Gijón es el emplazamiento perfecto para la cita de las gentes que escriben novela negra. La "Semana", que ha llegado a celebrarse incluso en la playa de Poniente, se ha adaptado muy bien. A ver lo que dura. En esta edición está confirmada la participación de unos 175 autores, con unas doscientas actividades (presentaciones, debates, recitales...) en diez días. Se procura no perder el tiempo. Hoy mismo, después de la apertura del recinto (17.00 horas) y la inauguración de las exposiciones, el escritor Juan Madrid (uno de los referentes del policiaco español) charló con los clubes de lectura de la ONCE.

La oferta de la "Semana" es amplia, como es costumbre. Entre los invitados están dos de los escritores nicaragüenses más sobresalientes, el novelista Sergio Ramírez (fue vicepresidente del país, hasta que cortó con Daniel ortega) y la poeta Gioconda Belli. Y más voces líricas: Luis Alberto de Cuenca, Luis García Montero o Manuel Vilas, que viene como narrador. Están confirmados el "Príncipe de Asturias" Antonio Muñoz Molina y su compañera Elvira Lindo. Y también, de un lado y otro del Atlántico, Rosa Montero, Rosa Ribas, Dolores Redondo, Juana Salabert, Berna González Harbour, Gabriela Cabezón o Selva Almada. Algunos políticos, que también escriben libros, estarán en Gijón. Es el caso de Juan Carlos Monedero. Y dibujantes de tanto carisma como el historietista Milo Manara, reconocido maestro del cómic erótico.