Prepara tu propio suavizante para la ropa con solo tres ingredientes

A la hora de poner la lavadora no solo tenemos que preocuparnos del utilizar un buen detergente, también necesitamos un buen suavizante. Lo que ocurre es que esto supone un importante dispendio económico, sobre todo teniendo en cuenta la actual situación económica. Pero hay una forma de ahorrar preparando nuestro propio suavizante, que además se realiza con solo tres ingredientes.

El lavado de la ropa es un proceso que se utiliza para limpiar prendas de vestir y otras telas utilizando agua y detergente. Existen diferentes métodos de lavado, incluyendo lavado a mano, lavado en lavadora y lavado en tintorería.

Lavado a mano es el método más antiguo y se utiliza para prendas delicadas que no deben ser lavadas en una lavadora. Para lavar la ropa a mano, se sumerge en un recipiente con agua tibia y detergente, se frota suavemente y luego se enjuaga varias veces en agua limpia.

Lavado en lavadora es el método más común y se utiliza para la mayoría de las prendas de vestir. Para lavar la ropa en una lavadora, se coloca en la lavadora, se añade detergente y se selecciona el ciclo de lavado adecuado. La lavadora utiliza agua y movimientos mecánicos para limpiar la ropa.

Lavado en tintorería es un servicio que se utiliza para prendas de vestir que requieren un cuidado especial, como prendas de lana o seda. En una tintorería, las prendas son lavadas y planchadas por profesionales utilizando técnicas y equipos especializados.

Suavizantes

Además de utilizar agua y detergente, también se pueden utilizar productos adicionales para el lavado de la ropa, como suavizantes, blanqueadores y productos para eliminar manchas.

Es importante seguir las instrucciones de cuidado en las etiquetas de las prendas de vestir para asegurar que se laven de la manera adecuada. También es importante separar la ropa por colores y tipos de telas antes de lavar para evitar la transferencia de color y reducir el riesgo de dañar la ropa.

Para elaborar nuestro propio suavizante sólo necesitaremos vinagre de limpieza, aceite de aloe vera y bicarbonato. Cogeremos una botella vacía en la que echaremos 750 mililitros de vinagre de limpieza. A esto le pondremos dos cucharadas de aceite de aloe vera y otras tantas cucharadas de bicarbonato. Mezclaremos bien y ya tenemos listo nuestro suavizante casero.