Científicos estadounidenses han identificado un "filtro" cerebral que cancela los sonidos que provoca nuestro movimiento, como los propios pasos, y permite centrar la atención en los ruidos del ambiente, según un estudio que publica "Nature". Un experimento con ratones ha permitido a investigadores de la Universidad de Nueva York y la Universidad de Duke describir este mecanismo que puede jugar un papel clave en el desarrollo del lenguaje en humanos. "La capacidad de ignorar los propios pasos requiere que el cerebro almacene y recupere ciertos recuerdos y ejecute algunos cálculos bastante espectaculares", afirmó David Schneider, uno de los autores principales del trabajo.