Cuesta imaginar a Vicente Prado, "El Pravianu", sin la gaita al hombro. Pero este músico de relieve puede presumir también de una dilatada trayectoria en el ámbito del humor, haciendo pareja artística con el monologuista José Manuel Reguero, "El Maestru". Ellos componen el dúo "Folixa Astur", con casi tres décadas de risas y aplausos a sus espaldas, y que ayer recibieron un merecido homenaje del público del Filarmónica, en el marco de la tercera jornada semifinal de la presente edición del Concurso y Muestra de Folclore "Ciudad de Oviedo", que organizan el Ayuntamiento y LA NUEVA ESPAÑA.

"Folixa Astur" se reunió sobre las tablas del Filarmónica para protagonizar la muestra en una jornada reducida por la ausencia de las dos cantantes que competían en la modalidad de tonada femenina: Lorena Corripio, vigente campeona, y Alicia Villanueva, que debuta en categoría absoluta tras triunfar en la juvenil. Pero el público del Filarmónica pudo disfrutar, en todo caso, de un programa de nivel, coronado con la sesión de humor protagonizada por El Pravianu y El Maestru.

El dúo puso en escena la pieza cómica "El problema de Pin", en la que Reguero interpreta a un asturiano, el Pin del título, que acude al médico, encarnado por Vicente Prado, para que le ayude a recuperar su virilidad tras un trasplante de pene. Tras un diálogo lleno de equívocos y dobles sentidos, y casi como si fuera un guiño a la berlanguiana "Tamaño natural", Pin acaba llevándose de la consulta el maniquí con el que el doctor trataba de completar la terapia sexual. El público, animoso, despidió entre fuertes aplausos al trío, maniquí incluida.

En lo relativo al concurso, la jornada estuvo marcada por la predominancia de los varones, en ausencia de las dos representantes de tonada femenina. En la primera parte de la sesión, hasta cuatro cantantes pasaron por el escenario del Filarmónica: Manuel López, Manuel Collado, Manuel Roza y Juan Robledo. Todo ellos completaron sólidas actuaciones y recibieron el aplauso de un público que se mostró especialmente cariñoso con la jovencísima Lucía Díaz, de 8 años, que compite en la categoría juvenil. La niña interpretó, con talento y saber estar, "Anda y señálame un sitio", y el público le hizo caso y, con sus aplausos, le mostró que su sitio está en el escenario.

Christian Lanza y Diego Lobo fueron los dos gaiteros que compitieron esta jornada, ambos en busca de uno de los cuatro billetes al Festival de Lorient que otorga el concurso a sus primeros clasificados. Otro que opta a ese privilegio es Fernando Vázquez Cárcaba, vigente campeón del "Ciudad de Oviedo" en la modalidad de gaitero solista, y que ayer presentó sus credenciales en la modalidad de pareja de gaita y tambor, formando dúo con Jaime Coto. Fueron de los más aplaudidos de la matinal.

También se llevaron el reconocimiento del público los cantantes Marta Martínez Grande y Ricardo Balmori, que hicieron dúo en la modalidad de canción dialogada, una de las que más agradan al respetable. La pareja interpretó "Esta noche fui de ronda" y "Óyeme paloma blanca", mostrando su complicidad sobre las tablas y una buena coordinación.

Pero quizás la mayor ovación de la mañana, junto a la que se llevaron El Maestru y El Pravianu, fue la que recibió el cantante Álvaro Fernández Conde, que cerró la jornada. Tres veces campeón en modalidad de tonada juvenil y una en la absoluta, el de La Masón demostró estar en plena forma y se llevó dos entusiastas ovaciones por sus interpretaciones de "Soy pastor" y "Adiós Asturias del alma". Un cierre de altura para una buena jornada.