Leonor de Borbón ha entrado en la adolescencia. No ha pasado desapercibido el estirón de la Princesa de Asturias este verano. Cada vez más alta y espigada, va perdiendo los rasgos aniñados y ganando presencia. A punto de cumplir 14 años, la Princesa tiene por delante varias citas en su agenda. La primera, el 12 de octubre, a la que lleva años acudiendo de la mano de sus padres, los Reyes, y con su hermana pequeña, Sofía, en el desfile militar del Día de la Hispanidad. A la semana siguiente estará en Oviedo, para asistir por primera vez a la ceremonia de entrega de los premios que se otorgan en su nombre, y a principios de noviembre viajará al décimo aniversario de los premios "Princesa de Girona", en Barcelona.

Las obligaciones de la joven, que ostenta el título de Princesa de Asturias desde junio de 2014, crecen a medida que lo hace ella misma. Sus padres, y muy en especial su madre, la Reina Letizia, han velado estrechamente la intimidad de sus hijas, preservándolas de la exposición pública y procurándoles, en la medida de los posible, una ambiente familiar rutinario. Pero las Infantas empiezan a dejar la infancia atrás y a asumir responsabilidades.

La etapa de visibilización institucional de doña Leonor empezó el año pasado. El 30 de enero, su padre, Felipe VI, le impuso el Toisón de Oro, que perteneció a don Juan de Borbón, y que para la Casa del Rey constituye "un elemento de tradición, continuidad e institucionalización en la figura de la Princesa de Asturias como heredera de la corona".

En septiembre del año pasado, la Familia Real se paseó por Asturias y visitó Covadonga, otro escenario cargado de significación para la institución monárquica, con motivo de las conmemoraciones del XIII Centenario del Reino de Asturias, el I Centenario de la creación del Parque Nacional de la Montaña de Covadonga y el I Centenario de la coronación canónica de la Virgen de Covadonga.

La primera vez que los españoles escucharon hablar a su Princesa en un acto oficial fue el pasado 31 de octubre, el mismo día que cumplía los 13 años, durante la conmemoración del 40.º aniversario de la Constitución. Doña Leonor leyó con soltura el artículo 1 del título preliminar, que establece que España es un Estado social y democrático de derecho, que la soberanía nacional reside en el pueblo español y que la monarquía parlamentaria es la forma política del Estado.

Sobre su próxima visita a Asturias y su primera vez en Oviedo, la ciudad natal de su madre, hay puestas muchas expectativas. Aún se desconoce si pronunciará algunas palabras durante la ceremonia de los premios en el Campoamor, como hizo su padre a su misma edad; tampoco se ha desvelado a qué actos asistirá, pero su sola presencia constituye todo un acontecimiento.

Más adelante, en noviembre, la Princesa asistirá en Cataluña a otra entrega de premios, acompañando de nuevo a sus padres y con su hermana, en un contexto menos amable por el reto independentista abierto.