Villaviciosa inicia su Semana Santa, que «viven con intensidad los que creen y los que no»

Cientos de vecinos se congregaron en la plaza de Obdulio Fernández para la bendición de Ramos antes de participar en la procesión de La Borriquilla

Villaviciosa vibra ya con la Semana Santa. Con las palmas y ramos en alto, los maliayeses inauguraron ayer «las fiestas de la muerte y resurrección de Jesucristo». Lo hicieron «conmemorando su entrada victoriosa en la ciudad santa de Jerusalén». «Entrada que simboliza ya el anticipo del reino de los cielos después de la resurrección», como señaló el párroco, Gonzalo José Suárez, durante la celebración del Domingo de Ramos, que congregó a una multitud en la plaza de Obdulio Fernández.

Acompañó el tiempo, con un intenso sol que los vecinos esperan se mantenga hasta el próximo domingo, y las familias fueron poco a poco llenando una plaza que minutos antes de mediodía lucía ya abarrotada. «En Villaviciosa la Semana Santa se vive con intensidad, tanto los que son creyentes como los que no», afirmó una de las muchas vecinas que acudieron a la cita.

La celebración dio comienzo con la llegada a la plaza del párroco y los directivos de la Cofradía de Jesús Nazareno, que llevan meses volcados en la organización de la Semana Santa, preparando los pasos, engalanando calles y cuidando hasta el más mínimo detalle de una convocatoria con más de 300 años de historia y que está declarada Fiesta de Interés Turístico Regional. «Hay muchísima gente», resaltó Nicolás Rodríguez, mayordomo de la entidad.

Desde una pequeña plataforma instalada para la ocasión, el párroco local, Gonzalo José Suárez, se dirigió a los presentes para desear que «esta celebración y los demás actos que acompañan a Jesús durante la Semana Santa nos hagan partícipes de su cruz, para que tengamos también parte en el triunfo de su victoria sobre la muerte». Posteriormente, descendió de la tarima para bendecir los ramos y las palmas. Tras esto, arrancó la procesión de La Borriquilla, que recorrió las calles del centro histórico de Villaviciosa de camino a la iglesia, donde se celebró la misa.

Esta es la primera de una serie de procesiones que llenarán las calles de la capital maliayesa hasta el próximo domingo y que volverán a contar, como viene siendo habitual, con una gran participación de niños. Ciento ocho menores se inscribieron el sábado para formar parte activa de la fiesta sacra; al más pequeño le faltan unos meses para cumplir los 4 años. De todos ellos, una veintena lo harán por primera vez, aunque muchos otros mantendrán con su presencia la tradición iniciada por padres y abuelos. Porque si de algo presume la Cofradía de Jesús Nazareno es de que el futuro está más que garantizado, como volverán a dejar patente una vez más.

Hoy, la programación continuará con la eucaristía en la iglesia de las Clarisas a las 19.00 horas, que volverá a repetirse mañana. A continuación tendrá lugar la segunda de las procesiones, la del Silencio, que saldrá de la iglesia parroquial a las 21.30 horas. Esta es una de las conmemoraciones más solemnes de toda la Semana Santa, con una Villaviciosa que enmudece para acompañar a Cristo crucificado.