Uno de cada diez incendios registrados en España se produjo en Asturias, según un informe elaborado por la organización WWF-Adena con la colaboración de la Fundación Axa. El estudio indica que, de los 203.194 incendios que se produjeron en España en el periodo entre 2001 y 2012, 21.574 fueron en Asturias, lo que supone el 10,6 por ciento del total. Once de estos fuegos fueron grandes incendios forestales (GIF), aquellos en los que arden más de 500 hectáreas. A pesar de ser una de las regiones con más siniestros, el número de grandes incendios forestales en Asturias fue uno de los más bajos. Sólo La Rioja y Navarra registraron menos.

El informe indica que en Asturias y Galicia hubo varios municipios con más de 100 incendios anuales. A Cañiza, en Pontevedra, sufrió entre 2001 y 2010 un total de 1.386 incendios. Le siguió Llanes, con 1.370 incendios en esos diez años. Viana do Bolo, en Orense, sufrió en el mismo período 1.108 incendios. En cuarto lugar figura Cangas del Narcea, con 1.022 incendios.

Asturias fue la tercera región con más incendios entre 2001 y 2012, sólo superada por Galicia, con 82.580 incendios (el 40,6 por ciento del total), y Castilla y León, donde hubo 24.058, el 11,8 por ciento de los producidos en España en esos doce años. Sin embargo, estas regiones sufrieron, comparativamente, un mayor número de grandes incendios forestales. En Galicia hubo 79 incendios de más de 500 hectáreas, y en Castilla y León, 80.

Por superficie quemada, Asturias se situó en el quinto lugar del país, con 104.177 hectáreas quemadas, sólo superada por Extremadura, con 130.068 hectáreas afectadas; Andalucía, 138.082 hectáreas; Castilla y León, 278.692 hectáreas, y Galicia, en la que se quemaron 340.741 hectáreas en 2001-2012.

Los once grandes incendios forestales registrados en Asturias supusieron la destrucción de 9.739 hectáreas, un 9,35 por ciento de la superficie total afectada por el fuego. Castilla y León fue la región en la que los grandes incendios destruyeron más hectáreas, en concreto 101.806, un 36,53 por ciento del total en esa comunidad. Siguieron Galicia, con 101.118 hectáreas destruidas por grandes incendios (el 29,68 por ciento del total), Valencia, con 79.739 hectáreas (el 84,08 por ciento del global de esa región) y Andalucía, con 73.774 hectáreas destruidas en grandes fuegos, un 53,43 por ciento del total. A nivel nacional, el número de grandes incendios forestales fue de 329, que quemaron 617.451 hectáreas, un 43 por ciento del total, que fue de 1.433.175 hectáreas afectadas.

Otros aspectos del informe resaltan que el país sufre anualmente una media de 16.500 incendios, una cifra considera «insostenible». El efecto de los grandes incendios es devastador: un 0,2 por ciento de los fuegos quema el 41 por ciento de la superficie afectada por los siniestros. Por otro lado, la mano del hombre está detrás del 96 por ciento de los incendios. El 55 por ciento de los mismos es intencionado, frente al 23 por ciento que ocurre por accidente o negligencia, y en ellos arde el 60 por ciento de la superficie afectada.