"No podemos seguir así, sin un sitio donde reunirnos, ni siquiera donde votar. Necesitamos el centro social ya". Con esta contundencia reclama César Solís, presidente de la asociación de vecinos de San Miguel de la Barreda, la construcción del ansiado centro social en la parroquia. Un equipamiento que, meses atrás, fue acordado por el Pleno municipal, pero que ahora el equipo de gobierno que lidera el socialista Ángel García quiere posponer por considerar que hay otras prioridades en el concejo.

Este domingo, los vecinos de San Miguel, 214 adultos según el censo electoral (de los 250 vecinos, contando a los menores) tuvieron que votar en el salón parroquial, algo que incluso motivó quejas de los fieles que acudieron a la misa de las 12.00 horas. Según confirmaron los interventores, entre los feligreses hubo quejas por el ruido que hacían los votantes que, en la sala anexa a la nave del templo, ejercían su derecho a elegir a sus representantes políticos.

"Hace unos años votábamos en el bar del pueblo, en una cochera que nos dejaba el dueño. Después, como de diez años para acá, nos colocaban una jaima aquí, delante de la iglesia. Pero ya en las últimas autonómicas y ahora, en las generales, nos han reubicado aquí, dentro de la iglesia. Y no es de recibo, porque no es un lugar adecuado y se molesta a la gente que viene a misa", relata Solís.

A juicio del líder vecinal, el problema de fondo fue la venta, en 1987, de las escuelas de la localidad. En otras parroquias de Siero, de hecho, se emplean estos antiguos centros educativos como centros sociales, pero en San Miguel no se puede hacer esa maniobra porque el inmueble ya no es de titularidad pública. Por ello, el colectivo vecinal propuso al Ayuntamiento de Siero la adquisición de un terreno, situado precisamente junto a la iglesia parroquial, para edificar en él un nuevo equipamiento público.

"Está todo hablado con los propietarios, pero el Ayuntamiento no acaba de actuar", explica Solís. Ante las reticencias del equipo de gobierno, el colectivo vecinal contactó con la oposición. Unas conversaciones que tuvieron respuesta en una moción del Partido Independiente de Siero (Pinsi) para que el Consistorio destinase 40.000 euros para adquirir esos terrenos.

La propuesta fue aprobada en el pleno de noviembre con el voto a favor de todos los grupos salvo PSOE y la Plataforma Vecinal de La Fresneda (PVF), que se abstuvieron. Si bien la asociación de vecinos de San Miguel aplaude el acuerdo plenario, exige a los grupos de la Corporación que no se relajen y que apuren al gobierno local para que ejecute el acuerdo, ante el temor de que la construcción del centro social quede en barbecho.