"La historia de la urbanización de La Fresneda no se concibe sin el Club de Campo". Así de tajantes se muestran varios de los socios, directivos y exdirectivos de una entidad privada que nació de la mano de la urbanización sierense hace ahora 30 años con el objetivo más que cumplido de vertebrar la vida social y dotar de una amplia oferta de ocio y deporte a una población que supera con creces los 5.000 vecinos.

Un total de 152.000 metros cuadrados de instalaciones gestionados por una empresa en la que sus 689 socios son accionistas y, por tanto, responsables de ocho pistas de padel, cuatro pistas de tenis, cinco campos de fútbol, tres piscinas descubiertas y otros muchos servicios como restaurantes, un centro de empresas y un largo etcétera que hace que muchos se pasen los fines de semana completos en el club.

"La oferta es tan amplia que hay gente que viene por la mañana y no se marcha hasta bien entrada la noche", expica el presidente de la entidad, Juan Ramón Muga.

Durante sus tres décadas de historia, el club ha sido toda una referencia por la que han pasado deportistas de la talla de Rafa Nadal, el futbolista Juan Mata, Fernando Alonso y equipos de fútbol como el Almería y el filial del Athletic de Bilbao para disfrutar de unos equipamientos que en su día fueron pioneros en deportes ahora tan populares como el pádel. "Fuimos los primeros y vimos cómo cada vez lo practicaba más gente", declara el gerente del club, Aarón Valentín Bouso.

Una evolución de la que fueron testigos de primera mano personas como Nicolás Arganza, primer presidente del club, que todavía hoy disfruta a diario de sus muchos servicios. "Cuando vi los terrenos me quedé entusiasmado, y yo mismo me encargué del diseño de las instalaciones", explica mientras toma un café con otro socio que compartió con él los inicios del club. "Cuando me dijeron lo que tenían pensado hacer eché las manos a la cabeza, pero ahora es una realidad", relata el socio Marino Suárez.

Ahora, tres décadas después, la entidad se enfrenta a nuevos retos para subsistir como son la fuerte competencia que antes no existía y que en ocasiones llega del propio sector público, con medidas como la apertura del polideportivo local. Adversidades a las que hace frente con iniciativas como fiestas gastronómicas y todo tipo de celebraciones infantiles y eventos que les permitan seguir siendo un club único en el Principado.