La peña Villa de Noreña anunció ayer la búsqueda de apoyos para proponer al Ayuntamiento que se dé a la bolera municipal el nombre de Emilio Alperi, presidente de la peña desde su fundación, en 1999, hasta su fallecimiento el día 14 de este mes.

El colectivo recoge así una idea planteada por el cronista oficial de Noreña, Miguel Ángel Fuente Calleja, que días después de su fallecimiento reclamó este reconocimiento para la persona que recuperó los bolos en el concejo tras muchos años sin esta actividad, hasta el punto de convertir al equipo local en el más laureado de todos los tiempos.

No obstante, los miembros de la peña Villa de Noreña reconocen que la iniciativa va más allá de los méritos deportivos y tratan de darle, en parte, un carácter personal. "Es una gran pérdida, muy sentida, porque era una de esas personas que siempre estaba ahí para respaldarte", declara el directivo José Manuel González Camblor, uno de los principales promotores de que la instalación deportiva pase a llevar el nombre del que el expresidente de la Federación Asturiana de Bolos, Desiderio Díaz, definió tras el funeral como "el padre de los bolos en Noreña".

Existen varios caminos para que la peña bolística pueda conseguir su pretensión, pero tras analizar las diferentes alternativas, decidió optar por una propuesta impulsada por el apoyo de varios colectivos locales. "Había la posibilidad de recoger unos cientos de firmas entre vecinos o cinco firmas de asociaciones del concejo, y optamos por la segunda, porque nos parece más sencilla y ágil", declara el propio González Camblor, que cuenta con lograr esas cinco aprobaciones de manera inminente. "Estaba vinculado a varios colectivos y era querido por miembros de otros, así que no creemos que haya ningún problema", apunta.

Acto en primavera

Si todo va según lo previsto, la bolera municipal podría estrenar nombre en un plazo aproximado de dos meses. No obstante, se precisan varios trámites -entre los que se incluye el paso por el pleno-, que los promotores confían en que sean superados sin problemas y pueda organizarse algún acto en primavera.

De todos modos, la peña Villa de Noreña asegura que este es solo una de las medidas con las que quiere reconocer a título póstumo la entrega de un hombre que convirtió al concejo en ejemplo de cantera del deporte autóctono por excelencia. Entre los planes que barajan los directivos del equipo local está el de organizar un homenaje e incluso un torneo memorial que se celebraría allá por abril o mayo. "La idea sería que el cambio de nombre coincidiese con la final de un torneo o con una exhibición especial", indican.