Medio centenar de jóvenes voluntarios de Cruz Roja se reunieron ayer en Candás en el marco del encuentro autonómico "Vida Asociativa de Cruz Roja Juventud". Además de una exhibición de músculo y garantía de relevo generacional, esta propuesta sirvió para que los colaboradores de todo el Principado se reuniesen, intercambiasen opiniones e hiciesen piña. El acto tuvo lugar en el centro polivalente de La Baragaña de la capital carreñense.

Además, las nuevas generaciones de la institución humanitaria, con edades de hasta 30 años, participaron en talleres de Violencia de Género, Drogodependencias y Primeros Auxilios para completar su formación de cara a seguir colaborando en los diferentes programas de voluntariado de la entidad, con presencia en todas partes del mundo.