Autor de «La grieta», relato ganador del L Premio Cuentos Lena

El escritor Alejandro Cuevas (Valladolid, 1973) es el ganador del L Premio Internacional de Cuentos Lena. El jurado eligió la pasada semana su obra, titulada «La grieta», entre los 418 trabajos que se presentaron al certamen. Se trata de una divertida historia que muestra al lector situaciones cotidianas. Cuevas es Licenciado en Filología Hispánica y Diplomado en Historia y Estética de la Cinematografía por la Universidad de Valladolid y ha publicado cuatro novelas: «Comida para perros» (1999), «La vida no es un auto sacramental» (1999), «La peste bucólica» (2003) y «Quemar las naves» (2004). Ahora está trabajando en el que será su quinto libro, pero el miércoles hará un paréntesis para acudir al Teatro Vital Aza de Pola de Lena y recoger su galardón.

-¿Cual es el argumento de «La grieta»?

-Es un relato humorístico. Es uno de esos cuentos en el que el lector tiene que construir la historia en su cabeza porque la información se le va dando de manera dispersa. Está construido en base a una comunidad de vecinos que tiene que buscar una solución para el problema de la aparición de una grieta. Describe esa fauna habitual que se junta en ese tipo de reuniones.

-¿El día a día y los hechos cotidianos son su mayor inspiración?

-La idea para los cuentos suele surgir de cosas que lees, conversaciones que pillas al vuelo, ideas que surgen y luego la vas desarrollando. Creo que no hay una fórmula fija para inspirarse.

-Ahora está trabajando en su quinta novela, ¿Cómo afronta este nuevo trabajo?

-Entre mi cuarta y esta quinta novela ha transcurrido mucho tiempo. Por temas laborales dejé un poco aparte la escritura. No por el tiempo, porque el tiempo se saca de donde sea, si no por las ganas. Es cierto que en los últimos tiempos he hecho muchos cuentos porque te permiten salir y entrar en la historia, cogerla o dejarla, da más independencia. La novela es un trabajo que requiere más resistencia.

-¿Es difícil encontrar una editorial en tiempos de crisis?

-Siempre es difícil. Cada novela es como empezar de cero. La crisis también se nota, claro. Las editoriales se vuelven mas conservadoras y no arriesgan a la hora de publicar. Pero es mejor no pensar estas cuestiones cuando se está escribiendo un libro.

-Piense en su recién estrenado galardón.

-Lo cierto es que este tipo de galardones, como el de Lena, te animan a seguir cuando tienes una época de transición. Te impulsan para seguir escribiendo. Aportan a los autores una satisfacción muy grande.

-Su obra ha sido elegida entre más de 400 trabajos.

-Estoy muy contento. Hablé con el presidente del jurado, que me dijo que les había gustado mucho el relato. El voto fue por unanimidad.

-¿Qué tiene «La grieta» para lograr una decisión tan firme?

-Creo que para conseguir un premio de este tipo, además de presentar un buen trabajo, tienes que sintonizar con el jurado. Los miembros del jurado del Premio Cuentos Lena creo que han captado el sentido del humor del cuento y les ha gustado el relato de situaciones cotidianas. Este es un premio prestigioso y, además, se cumple medio siglo del galardón. Es una cifra muy redonda y estoy encantado de haberlo ganado.

-¿Era la primera vez que se presentaba?

-Creo que me había presentado con anterioridad. Pero no recuerdo en qué año ni con qué trabajo.

-Con sólo 26 años ya consiguió una mención especial del jurado en el prestigioso Premio Nadal, ¿A qué edad empezó a escribir?

-Empecé muy pronto, siempre me ha gustado. Con 16 o 17 años gané varios galardones de jóvenes autores con relatos cortos. Enseguida me pasé a la novela y en los últimos años había vuelto a la escritura de relatos cortos. Mi historia como escritor es un poco extraña, con altibajos.