Madrid / Oviedo, Agencias
El Ministerio de Hacienda restituirá a los funcionarios en el primer trimestre del año las cotizaciones de la paga extraordinaria de diciembre, que habían sido descontadas de la nómina de ese mes a pesar de no haber recibido la paga de Navidad. El Gobierno vasco, por su parte, aprobó el pasado lunes adelantar a sus funcionarios las pagas extraordinarias de 2013, de tal manera que la de julio la abonará en enero y la de diciembre en julio. De esta manera, no se enfrenta al Gobierno de Mariano Rajoy y respeta las líneas establecidas por el Tribunal Constitucional.
El departamento que encabeza el ministro de Hacienda y Administración Pública, Cristóbal Montoro, emitió ayer un comunicado en el que afirmaba que «lamenta» el «impacto negativo que la falta de adecuación de la cuota por derechos pasivos y aportaciones a mutualidades por la paga extra de diciembre haya podido tener en el colectivo de los funcionarios».
Por esa razón, en el primer trimestre de 2013 «subsanará este efecto» restituyendo un importe equivalente a las cotizaciones de la paga extra por estos conceptos que se han descontado en la nómina de diciembre.
El Gobierno aseguró que es legal la cotización de los funcionarios por la paga extra de Navidad aunque este año no la cobren, porque la suspensión de dicha paga es independiente de la cuantía de las cotizaciones anuales de estos trabajadores.
En una respuesta a una pregunta parlamentaria de UPyD, el Ejecutivo explicó que el pago de las cotizaciones «no está en función de las retribuciones», sino del «haber regulador» que sirva de base para el cálculo de la pensión, y que establecen, para cada ejercicio, los Presupuestos Generales del Estado.
Se trata, por tanto, de una cuota en cómputo anual, aunque se divide en catorce cuotas, y en junio y en diciembre se abonan por partida doble.
El Gobierno señala que la cuantía de estas cuotas se calcula mediante la aplicación de un tipo porcentual (3,86%) al haber regulador que sirve de base para el cálculo de la pensión correspondiente, y sólo se minora en los casos de trabajadores que tienen reducida su jornada.
Los preceptos de dichas cotizaciones, añade, no se han modificado con el decreto de julio que suprimía la paga extra.
En el caso de los trabajadores integrados en la mutualidad de las fuerzas armadas (Isfas), el porcentaje de cotización es del 1,69%, también se abona en catorce cuotas, y el pago es igualmente doble en junio y diciembre.
El Gobierno vasco, por su parte, aprobó el pasado lunes el proyecto de ley de Medidas sobre las Pagas Extraordinarias de 2013, de un único artículo que busca eliminar los obstáculos para que el próximo año se adelanten las extras de verano y navidad a los meses de enero -en los primeros días- y julio.
El Ejecutivo asturiano, por su parte, también estudia la posibilidad de adelantar a enero la paga extraordinaria de julio, para compensar a sus 36.000 funcionarios autonómicos. Pero las dificultades legales parece que, de momento, impedirían esa medida. Los funcionarios propusieron hace varias semanas compensar la pérdida de la extra de diciembre con complementos mensuales, pero el Gobierno no les ha respondido.
