El Gobierno ha dado luz verde a la privatización del 49% del capital de Aena Aeropuertos, gestor de 46 aeródromos -entre ellos el de Asturias- y dos helipuertos. El 28% se colocará en Bolsa a través de una oferta pública de venta (OPV) y el 21% restante se licitará para un núcleo estable de accionistas seleccionados mediante un proceso de concurrencia. Será la mayor privatización desde 1998, año en el que se vendió el 29,5% de la eléctrica Endesa. El Estado mantendrá la mayoría del capital de Aena con un 51%. La entidad empezó a obtener beneficios en 2013, tras años de recortes de costes y deuda.

El 100 % de Aena tiene un valor estimado de 16.000 millones. Con ello, el 49 % que estará en manos de inversores privados rondará los 7.840 millones, mientras que el porcentaje que saldrá a Bolsa ascenderá a 4.480 millones, según fuentes del sector.

Con esta capitalización bursátil, el valor estimado de Aena en bolsa será uno de los más significativos del Ibex 35, llegando incluso a superar al que contabilizan doce empresas del principal selectivo de la Bolsa española, entre ellas grupos como FCC, Sacyr, Técnicas Reunidas, Ebro, Viscofán, Gamesa o Día. Además, protagonizará una mayores OPV de la historia de España.

Para articular este proceso, el Ejecutivo prevé publicar en julio el nuevo marco regulatorio del sector aeroportuario para comenzar a seleccionar a los inversores de referencia en septiembre.

Para ello, el Gobierno aprobará, cada cinco años, un marco regulatorio (DORA) que establecerá los niveles de calidad de servicio, los estándares de capacidad de los aeropuertos, las condiciones mínimas de servicio y de inversiones y el marco tarifario (las tasas aeroportuarias estarán congeladas en 2015). Así, y una vez que se registre el folleto en la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), la sociedad fijará el precio máximo para los inversores cualificados y minoristas en noviembre, cuando se iniciará la cotización.

El Gobierno también dio ayer "luz verde" a que una compañía privada entre a prestar servicios de transporte de viajeros en tren de Alta Velocidad en competencia con Renfe, lo que supone romper su histórico monopolio e e iniciar la liberalización del sector, que se abordará "de forma progresiva", según la ministra de Fomento, Ana Pastor.

En una primera fase se dará entrada a un solo operador privado, que podrá prestar servicio en una sola línea, la del AVE Madrid-Levante, durante siete años. Cuando se cumpla el plazo, el corredor quedará "abierto a la plena competencia", y otros operadores podrán entrar a prestar servicio por la línea.