M. C.

Unas 2.000 personas participaron ayer en la manifestación convocada por USO, CGT, CSI, CNT, el Sindicato Ferroviario y SUATEA, para exigir la reapertura de Factorías Juliana, astillero que entró en concurso de acreedores en mayo de 2009, dos años y medio después de que el Gobierno central lo hubiera privatizado.

«Estamos aquí para exigir la reapertura de Juliana y para denunciar al Ayuntamiento de Gijón y al Gobierno asturiano, que han favorecido el cierre del sector naval en la bahía de Gijón. Naval Gijón y Juliana están cerrados y tiene que quedar claro también que eso se ha hecho con la firma y el apoyo de CC OO y UGT», señalaron los convocantes a través de la lectura de un manifiesto, al concluir la marcha.

Con 100.000 parados en Asturias y más de 30.000 en Gijón y el cierre de empresas «el único camino que le dejamos a la juventud asturiana es la emigración: Llevamos más de 30 años de reconversión en Asturias y el PSOE no parará hasta desmantelarlo todo», agregaron.

Recordaron un pasado en el que los astilleros daban ocupación directa e indirecta a más de 5.000 personas, que a su vez eran clientes de comercios y establecimientos hosteleros de la zona de El Natahoyo. En ese contexto recordaron que el Ayuntamiento de Gijón «fue el único que no defendió que Juliana siguiera siendo pública, mientras hasta la alcaldesa del PP de Cádiz defendió que el astillero (de esa ciudad) siguiera siendo público», algo que logró durante el proceso de desmantelamiento del grupo Izar. Una situación ante la que, según los convocantes, «IU no dice ni pío» mientras comparte gobierno con el PSOE en Asturias y en Gijón.

A la protesta de ayer acudieron, a título personal, antiguos trabajadores de Juliana vinculados a sindicatos distintos a los convocantes.