M. CASTRO

El Principado ha remitido a grupos ecologistas, colectivos vecinales y a otras administraciones públicas la memoria ambiental del proyecto de ampliación de las instalaciones de Cogersa a la zona de Vilorteo, en el municipio de Gijón. De este modo se inicia la tramitación ambiental de un proyecto de ampliación que originariamente se vinculó a la construcción de la planta incineradora, trabajos ahora paralizados en los tribunales. Los ecologistas sostienen que los 109.000 metros cuadrados que ganará Cogersa con esta ampliación pueden permitir ampliar el actual vertedero de basuras y promover también la instalación de plantas de reciclaje, haciendo, así, innecesaria la incineradora. La dirección de Cogersa defiende desde hace años que la incineradora es necesaria ante el supuesto agotamiento del actual vertedero de basuras.

Las obras previstas consisten en una explanación de esos terrenos y en la construcción de los accesos a los mismos. El área afectada se ubica en el valle que forma el arroyo de La Oscura, en su margen izquierda, al pie del actual vertedero de escombros de Cogersa. El nuevo vial de acceso a la zona se iniciará en la carretera principal de entrada a Cogersa, conectando con ella a la altura del acceso al pueblo de Liérvado, y seguirá hacia el Este, hasta conectar con la actual carretera del vertedero de escombros.

La obra incluye ampliaciones de la calzada actual, curvas con más radio y la eliminación de la intersección con la carretera municipal de Vilorteo, mediante la construcción de un viaducto para dar continuidad a dicha carretera municipal. El vial de acceso discurrirá bajo dicho viaducto para independizar ambos tráficos. El desarrollo que prevé Cogersa para el área industrial de Vilorteo, dentro del plan de futuro del consorcio para el período 2002-2025, incluye también una estación eléctrica para evacuar la energía que se generaría en algunos de los equipamientos albergados, como podría ser la incineradora si finalmente se construye. Ese plan de futuro tenía la previsión de que en 2013 estuviera operativo en Vilorteo una zona de clasificación de 240.000 toneladas de basura bruta, ampliable a 480.000 toneladas anuales, para reciclar envases y chatarras, con la posibilidad de ampliar el reciclaje a materia orgánica.

La inversión que se preveía inicialmente para este proyecto era de 22 millones de euros, ampliable a 38,4. Esta clasificación de basuras que prevé Cogersa en Vilorteo puede tener dos usos bien distintos. Uno de ellos es su reciclaje, incluyendo el compostaje de materia orgánica, lo que eliminaría la necesidad de una incineradora. Otro es hacer una clasificación previa de la basura para incinerarla (conviene eliminar los metales para evitar averías en las incineradoras), que es la idea que manejaba Cogersa al menos hasta que el proyecto de la incineradora se frenó en los Juzgados.

En el área de Vilorteo también se prevé el tratamiento de lodos, con el secado de 110.000 toneladas en 2013 para quemar en la incineradora, invirtiendo 15 millones de euros.

Otro de los proyectos previstos para esta área, con una inversión de 10 millones, es el reciclaje de residuos industriales no peligrosos.