M. CASTRO

La compañía asturiana Idesa, que tiene su sede central en el Parque Científico y Tecnológico de Gijón y sus instalaciones fabriles junto al puerto de Avilés, se ha aliado con la compañía belga G & G International para optar a la construcción de los soportes para aerogeneradores instalados en alta mar, un negocio en plena expansión en el mar del Norte y en el Báltico. Idesa y G & G ya han logrado dos importantes contratos con compañías eléctricas de Alemania y Bélgica. El último de ellos, para el suministro de setenta y dos plataformas para un campo eólico frente a las costas de Zeebrugge (Bélgica), de las que Idesa fabricará treinta y dos y su socio belga cuarenta. El contrato asciende a 48 millones de euros.

Idesa realizará la entrega de esas treinta y dos piezas para soportar aerogeneradores entre finales de este mes y principios de 2013. Se trata de las piezas de transición entre la parte enterrada en el subsuelo marino de los soportes y el fuste de los aerogeneradores. Ésta es la parte más compleja de la instalación, dado que es la que tiene que soportar el embate de las olas y los movimientos de las mareas. Son piezas de 22 metros de alto por 4,5 de diámetro y 200 toneladas de peso. El destino es la granja eólica que Northwind Offshore promueve a 37 kilómetros de Zeebrugge (Bank Zonder Naam).

Idesa y G & G International lograron el contrato de Northwind el pasado mes de julio, después de que hubieran pactado concurrir conjuntamente el pasado mes de diciembre. El entendimiento entre ambas empresas para optar al contrato belga fue fácil, dado que la alianza entre las dos compañías ya había dado sus frutos en 2011, cuando Idesa y G & G se hicieron con otro contrato de 55 millones de euros para construir treinta monopilotes y piezas de transición para un campo de aerogeneradores en aguas alemanas del mar del Norte. El encargo lo efectuaron los grupos energéticos alemanes Ewe y Enova para el campo eólico Riffgat, frente a las costas de la isla alemana de Borkum. Idesa envió doce de esos monopilotes y piezas de transición. El desarrollo de la energía eólica marina en el norte de Europa es un objetivo estratégico de la UE.