El juzgado de lo social número uno de Gijón ha condenado al Ayuntamiento a pagar 4.026,28 euros a una técnico de Educación Infantil por despedirla del centro de Viesques. El tribunal estima parcialmente la demanda interpuesta por la educadora contra el consistorio al considerar que su caso no atiende un despido improcedente. La técnico firmó el 9 de septiembre de 2014 un contrato de interinidad con el Ayuntamiento para trabajar a tiempo completo en la escuela de Viesques con un sueldo mensual de 1.725,55 euros. El 14 de agosto de 2017 se le comunicó la extinción de su contrato.

Es entonces cuando la trabajadora alega que su duración está condicionada a la falta de un sustituto, "siendo así que una de las razones de finalización del contrato es la extinción de la causa que dio lugar a la reserva del puesto de trabajo". Por ello, pide una indemnización correspondiente a 12 días de salario por año trabajado y 4.026,28 euros más.

El tribunal afirma que "no puede considerarse que estemos ante un despido improcedente, sino ante un derecho de la trabajadora a ser indemnizada". "El cese es lícito en cuanto se cumple con la condición resolutoria implícita en el propio contrato de interinidad", concluye.