Lagos de Covadonga
(Cangas de Onís),
Alba SÁNCHEZ R.
La afluencia de turistas en el puente del primero de mayo no sólo no ha sido suficiente, según la asociación de empresarios de los Picos de Europa, Incatur, para remontar los catastróficos resultados de la pasada Semana Santa, sino que se ha quedado muy por debajo de las expectativas del sector. Apenas se superó el 45 por ciento de ocupación en todos los tipos de alojamientos de la zona, un dato que contrasta con el casi 85 por ciento que llegó a haber entonces en los alojamientos de casa completa.
Dada la inestabilidad meteorológica, los visitantes prefieren hacer las reservas a última hora y es cada vez más frecuente que se reserve en el día en el propio lugar del alojamiento. Tampoco los restaurantes de la zona interior de la comarca oriental están registrando gran número de visitantes, como en otras campañas, sino que están acogiendo el mismo volumen de turistas de un fin de semana cualquiera. Sólo los restaurantes con terrazas bien equipadas consiguen llenar.
La tregua que dio la lluvia en la mañana de ayer propició que muchos de los visitantes repartidos por el Principado se acercasen a dos lugares tan emblemáticos como el Real Sitio de Covadonga y los Lagos Enol y La Ercina. Había turistas llegados por todo tipo de medios: bicicleta, moto, vehículos de colección... y caminantes. Nadie se quiso perder la que es una visita obligada en cualquier estancia vacacional en Asturias.
Este puente fue suprimido por el Principado del plan de trasporte al parque nacional de los Picos de Europa, de manera que los vehículos privados tienen libre acceso al espacio protegido. Muchos visitantes aprovecharon esa oportunidad.
Los hermanos Juan y Borja Jáuregui Olaguibel, de San Sebastián, se desplazaron desde su ciudad de residencia hasta el municipio cangués. Al lado de otras 23 personas más llegadas de todos los rincones del País Vasco, estos hermanos están realizando la ruta de Santiago por etapas. El domingo finalizaron el recorrido en Oviedo y, sin pensárselo dos veces, acudieron con sus bicicletas en diferentes trasportes a la ciudad de Cangas de Onís y comenzaron la emblemática ascensión de la Vuelta ciclista a España a los Lagos de Covadonga. Eso sí, con parada obligatoria en el Santuario. Seis amigos de la vecina Portugal tampoco dejaron pasar su último día de estancia en el Principado para descubrir los encantos del Real Sitio y del parque nacional. Otros acudieronn en familia, como los Hormigos Tapia, que se hicieron la foto de rigor junto a la placa del lago Enol, y también llegaron al Santuario excursiones programadas, como una procedente de Soria.
Algunos visitantes desconocían que el parque nacional tuviera restricciones de tráfico en las épocas de mayor afluencia de visitantes. La tranquilidad del día de ayer contrastó con las enormes colas de vehículos que se registraron a mediodía del domingo, cuando fue necesario que el personal del parque nacional de los Picos de Europa regulara el tráfico a la altura del lago Enol.
