Carlos Cima García, primer secretario de gobierno del Tribunal Superior de Justicia de Asturias y una institución del Derecho Procesal en Asturias, falleció ayer en Oviedo, a los 84 años de edad. El funeral se celebrará mañana en la iglesia de San Isidoro El Real; hasta entonces la capilla ardiente permanece en el tanatorio de Los Arenales.

Carlos Cima era natural de Caravia, en Limanes, lugar donde había nacido en 1930 y al que siempre permaneció estrechamente ligado. Su padre trabajaba como ajustador de la Fábrica de Armas de Oviedo y su madre llevaba la casa y la casería. Con ella, como contaba hace unos años en una entrevista para LA NUEVA ESPAÑA, venía a vender manzanas al Fontán cuando era niño. Carlos Cima podría haber entrado como aprendiz en La Vega, pero había demostrado su valía para los estudios y la familia decidió que estudiara. Así ingresó en el Instituto Alfonso II.

Cima destacó como jurista. Fue secretario del Juzgado de primera instancia e instrucción número 2 de Oviedo durante 24 años y terminó su carrera como secretario de gobierno del Tribunal Superior de Justicia de Asturias. También ejerció la docencia. Fue profesor asociado de Derecho Procesal en la Universidad de Oviedo desde 1976 hasta el 2000, en que se jubiló. Fue miembro de Justicia Democrática. Además, era colegiado de honor del Colegio de Abogados y había sido distinguido con la Cruz de primera clase de San Raimundo de Peñafort.

Con su esposa, Palmira Orozco, ahora viuda, tuvo dos hijos, Carlos y Manuel.