Con seis jornadas aún por disputarse, el Oviedo de Anquela cuenta con margen suficiente para mejorar el saldo de sus inmediatos precedentes. Con Egea y Generelo, los azules acabaron la temporada en el noveno puesto, con 59 puntos sumados, 52 goles a favor y 51 en contra. Mejoraron los números al año siguiente, aunque fue insuficiente para estar en el play-off: el equipo de Hierro acabó el curso con 61 puntos, y los mismos goles a favor y en contra, 47. Se tuvo que conformar con la octava plaza.

Ahora, el Oviedo de Anquela navega séptimo en la clasificación, con 56 puntos, a dos del play-off de ascenso, el objetivo perseguido en el mes y medio que queda de competición. Para lograrlo, deberá mejorar los números de los dos últimos años. Al Oviedo le hacen falta cinco puntos para igualar el saldo con Hierro de entrenador y seis puntos para mejorarlo. Para ser mejor equipo que el de hace dos temporadas, solo hacen falta 4 puntos más de los 18 que están en juego hasta el final.

Uno de los índices en los que se mostró fuerte el equipo de Hierro fue en el de partidos sin encajar ningún gol. La irregularidad de los azules hizo que el equipo acumulara encuentros con la meta impoluta (18 en total) con llamativas goleadas, todas fuera de casa. Para lograr igualar esa marca de 18 choques, Alfonso no podría encajar ningún tanto de aquí al final de la temporada regular para igualar esa marca: lleva 12. Hace dos campañas, fueron 13 los choques sin encajar.