El Sporting pierde control: Nacho Martín apunta a un mes de baja por un esguince de rodilla

La enfermería vuelve a ser un dolor de muelas para el Sporting. Justo cuando el proyecto se ha levantado, con dos victorias de forma consecutiva y vuelve a estar situado en play-off, –ahora en quinta posición–, y encara una gran final el sábado en el Martínez Valero de Elche, los problemas físicos vuelven a acechar. Hay algunos jugadores con lo justo, pendientes de evolución para llegar a la cita en tierras alicantinas.

La mayoría de los afectados compiten además en la misma posición: el centro del campo, donde Ramírez cuenta ahora mismo con los efectivos justos. Entre todos los mermados que alcanzan al club esta semana el que más preocupa, de largo, es Nacho Martín, que podría perderse varios partidos de competición, además del duelo del sábado en Elche, que es prácticamente un imposible. El canterano, de 22 años, no formó parte de la sesión de entrenamiento de ayer. Tampoco estuvo el martes con el resto de sus compañeros, en la vuelta al trabajo. Le han hecho ya algunas pruebas, y los primeros resultados apuntan a que puede tener un esguince de rodilla. Su ausencia dependerá luego de que se confirme esa lesión.

También del grado, algo que se revisará hoy en una nueva ronda de pruebas médicas para determinar ya con más exactitud el alcance de la dolencia. Pero esas primeras observaciones prevén una periodo de baja de unas cuatro semanas. Sería –si se confirma– un varapalo enorme para el club, que perdería a uno de sus efectivos más en forma en el tramo ya decisivo de campeonato, con el equipo luchando por el ascenso a Primera. Y, por supuesto, para un jugador que ha dado un paso adelante en esta segunda vuelta. Martín, que pasó de puntillas durante la primera fase de la competición, encadenaba hasta siete partidos consecutivos jugando de titular. Un periodo en el que ha repartido dos asistencias. La última, a Mario González, clave en la victoria ante el Cartagena (1-0). Aunque el caso de Nacho Martín es el más delicado, en Mareo están igualmente pendiente del estado de otros futbolistas. Hay otros jugadores que se vaciaron en la victoria ante el Cartagena y estaban algo cargados, como Nacho Méndez. Pero el de Luanco apunta a estar en perfecto estado.

Otros, en cambio, están pendientes de revisión, más allá de la baja segura de Campuzano, y la situación de Bamba, compleja. Uno, Rivera, que tuvo ayer alguna molestia aunque podría estar para el choque en el Martínez Valero. Otro, Zarfino, también un caso más especial. El medio uruguayo regresó ante el Cartagena a la competición tras más de un año de batalla. En los últimos entrenamientos se ha ejercitado al margen, con alguna molestia. Su concurso este sábado no está 100% descartado, pero parece difícil. Otero, por su parte, siguió al margen del grupo ayer, aunque los servicios médicos confían en que pueda estar ya a disposición de Ramírez para el entrenamiento de esta mañana (10: 30 horas en Mareo).

Pier prueba de ancla

Ayer, de hecho, probó con Róber Pier como ancla, en el centro del campo, dentro de una ronda de ensayos. Fue solamente un ensayo, pero las condiciones del gallego lo convierten en una opción para jugar como "5" en el decisivo tramo de campeonato. Ramírez, que valora su polivalencia, ya tiró de él como lateral derecho ante el Cartagena, con una respuesta notable. Ante la delicada situación que tiene ahora la medular y la fortaleza ofensiva del Elche, un club con un gran arsenal en ataque, el técnico canario volvió a ensayar con defensa de 5 para la batalla en el Martínez Valero. Quedan aún dos entrenamientos por delate, por lo que nada está decidido. Pero la vuelta a la zaga de tres centrales, con dos carrileros, asoma como una alternativa muy real para anular las capacidades ofensivas de los de Beccacece, que afrontan el encuentro con la necesidad de sacar los puntos tras tres encadenar derrotas seguidas y un empate en los últimos partidos.

Suscríbete para seguir leyendo