Oviedo, Luján PALACIOS

Un «hambre» sexual voraz le puede costar a un vecino de Gijón dos años de prisión y una indemnización de 6.000 euros por daños físicos y morales a su víctima. El Juzgado de lo penal de Oviedo acoge hoy el juicio contra un hombre que amenazó de muerte a una joven ovetense y al grito de «lo único que quiero es comerte el pollo» abusó sexualmente de ella.

Los hechos se remontan a octubre del año 2002, cuando, según recoge el escrito de calificación provisional del ministerio fiscal, el acusado, J. J. Q. R., conoció a una joven de 32 años en el portal del domicilio de la chica, en la capital ovetense.

Según relata la acusación pública, el acusado y la joven entablaron una conversación amistosa en torno a las nueve de la noche en el mismo portal y, acto seguido, subieron juntos en el ascensor a la vivienda de la mujer. La chica habría dejado pasar al hombre a su vivienda de forma voluntaria, según la fiscalía. Una vez en el interior, los dos habrían continuado manteniendo una charla distendida, pero el acusado varió su actitud de manera radical en pocos minutos.

Así, tal y como relata la acusación, J. J. Q. R., «guiado por el ánimo libidinoso», se abalanzó violentamente sobre la víctima y la tiró al suelo, donde supuestamente la amenazó de muerte.

«Lo único que quiero es comerte el pollo», aseguró el agresor a su víctima. Pero no se trataba de un repentino ataque de hambre ni el objeto de sus deseos era ninguna vianda cocinada en el domicilio. Según relata el escrito del fiscal, la víctima, atemorizada, tuvo que despojarse de sus medias y de la ropa interior, tras lo que el acusado procedió a acariciarle sus partes íntimas con la lengua.

Una vez saciado su apetito sexual, el hombre abandonó finalmente la casa a instancia de la víctima, que de inmediato llamó a la Policía para que se personara en el domicilio. La joven presentaba, tras un primer examen físico, algunos moratones en el brazo y el muslo izquierdos, «debido a la violencia desplegada por el acusado para perpetrar la agresión», subraya la fiscalía.

Los hechos denunciados por la mujer constituyen un delito de agresión sexual, por el que el ministerio fiscal solicita para J. J. Q. R. una pena de dos años de prisión, así como una indemnización por una cuantía de 6.000 euros para la víctima en concepto de daños físicos y morales.

El hombre tiene un antecedente por delito contra la seguridad del tráfico, que puede ser susceptible de ser cancelado. La vista por este caso se celebra a las diez de la mañana, en el Juzgado de lo penal número 4 de Oviedo.

En el portal

La víctima y su agresor se conocieron en el portal de la vivienda de la joven, en octubre del año 2002. Tras entablar una conversación amistosa, los dos subieron juntos en el ascensor hasta el domicilio de la mujer.

Y en la vivienda

Una vez en la casa de la víctima, la charla siguió en tono distendido, pero la actitud del acusado cambió supuestamente en cuestión de minutos. Así, según el fiscal, tiró a la joven al suelo, la obligó a despojarse de sus medias y su ropa interior y le lamió sus partes íntimas tras asegurarle: «Lo único que quiero es comerte el pollo». La fiscalía pide para él dos años de cárcel.