Fueron más de tres décadas dedicadas a impulsar la donación de órganos hasta conseguir que Asturias sea un referente nacional con tasas de donantes por millón de habitantes. Jesús María Otero Hernández -Chus Otero para todos los que le conocían- recibirá la medalla de plata de Asturias a título póstumo, lo que deja cierto regusto amargo, no por inmerecido, sino por un reconocimiento tardío, lamentaba ayer su viuda, Lola Escudero.

Aún así, mostró su satisfacción por un galardón que "es un reconocimiento a mi marido porque es la parte más visible, pero en realidad es del sistema sanitario y de sus grandes profesionales y especialistas que hacen posible los transplantes. Y a los donantes de órganos y a sus familias, que con su decisión permiten que miles de personas sigan viviendo", afirmó Lola Escudero.