El veinte por ciento de nuestros mayores viven en condiciones "muy deficientes". Esta es la conclusión a la que ha llegado un reciente estudio del Observatorio Social de "La Caixa", que concluye que los problemas a los que más se enfrentan los mayores son la accesibilidad, la falta de calefacción, no disponer de calefacción y el hacinamiento. En este estudio, Irene Lebrusán, doctora en Sociología, analiza las diferencias entre envejecer en un pueblo pequeño o en una macrociudad, a efectos de calidad de la vivienda.

Concretamente, el informe apunta que el 20,1 % de las personas mayores de 65 años en España (1.596.675 personas) reside en viviendas que sufren vulnerabilidad residencial extrema, un porcentaje más elevado en las ciudades de entre 10.000 y 100.000 habitantes, pudiendo alcanzar el 23,5 % del total de la población mayor en aquellos municipios de entre 20.000 y 50.000 habitantes, La autora explica que la vulnerabilidad residencial extrema surge de la acumulación de problemas en una vivienda, que va mermando la calidad de vida de quienes residen en ella. Otra carencia detectada es la falta de acceso a agua corriente, que si bien afecta a 431.818 personas mayores se considera problema grave ya que el agua es un bien necesario, imprescindible para obtener la cédula de habitabilidad de la vivienda y, además, casi la totalidad de la población española dispone de él, lo que indica su importancia relativa en la sociedad.

La autora pone el foco en la necesidad de corregir estos problemas para garantizar una vejez autónoma y de calidad, así como integrada en la sociedad, lo cual pasa por cubrir las necesidades básicas en las viviendas. Como señala el informe, el 96,4 % de las personas mayores decide permanecer en su vivienda durante la vejez, frente al 3,6 % que vive en residencias o instituciones de otro tipo. La evidencia disponible, recuerda el artículo, muestra que envejecer en casa beneficia la salud y el bienestar de los mayores, siempre que la vivienda favorezca un envejecimiento de calidad y no exponga a los mayores a situaciones de vulnerabilidad.

La Obra Social "la Caixa" impulsa desde sus orígenes, hace ahora más de cien años, un amplio programa para las personas mayores que les ofrece un abanico de actividades variadas y recursos distribuidos en 615 centros de mayores, propios o en convenio con administraciones públicas, en toda España. Anualmente, 821.532 personas mayores participan en más de 17.500 iniciativas sociales, culturales, de salud y tecnológicas, destinadas especialmente al fomento del envejecimiento activo, la participación social, y el respeto y la dignidad de este colectivo.