Una sentencia que ganó CC OO abre la puerta a que cada año unos 200 profesores interinos cobren los veranos. El Juzgado de los contencioso-administrativo nº 1 de Oviedo considera que las vacaciones no disfrutadas deben ser consideradas como tiempo trabajado a la hora de realizar el cómputo para la prórroga del contrato del verano. En concreto, la sentencia analiza el caso de una docente que fue contratada el 28 de enero de 2019 y que dio clases hasta el 30 de junio. Son 154 días, a los que habría que sumar los 13 días que generó de vacaciones y que no disfrutó -fueron retribuidos-. Eso hace un total de 167 días.

Sin embargo, la Consejería no los computó: se quedó con los 154 y la cifra mínima para prorrogar el contrato es de 165 días (cinco meses y medio). El Juzgado estimó en su totalidad la demanda de CC OO y no admite recurso. El sindicato pedirá incluir esta interpretación a la comisión de seguimiento del "acuerdo de interinos".