La Nueva España

La Nueva España

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

¿Qué debe pasar para que permitan abrir los bares? Estas son las condiciones que marca el Principado para la vuelta de la hostelería

El Gobierno de Barbón fija unos umbrales de los que bajar en la incidencia de casos de covid como objetivo para que los locales hosteleros retomen la actividad

Terrazas recogidas en Avilés tras decretar el cierre de la hostelería Mara Villamuza

La hostelería no abrirá todavía. Y seguirá cerrada, al menos, hasta el próximo jueves 10 de diciembre. El día antes, el miércoles 9 del siguiente mes, el Principado analizará de nuevo sus datos epidemiológicos y, en base a ellos, decidirá si adelanta la reanudación de la actividad en los bares antes del fin de los quince días de prórroga que comenzarán esta medianoche. ¿Pero en qué parámetros de evolución del covid en la región se fijará?

La Consejería de Salud, liderada por Pablo Fernández, esgrime lo que ellos recalcan que son "datos objetivos" para defender que "no estamos en condiciones de que la hostelería abra de nuevo", tal y como señaló el propio consejero. Así se explicaron ayer a la patronal hostelera Otea en una tensa reunión. El sector de bares y restaurantes, por contra, respeta los datos aportados por Salud, pero recalca que hasta ahora se ha demostrado que el problema de los contagios no se encuentra en sus locales. "No puede ser nuestro sector el que luche contra los datos de la epidemia. Es una tomadura de pelo", replica el presidente de Otea, José Luis Álvarez Almeida.

Esos datos objetivos a los que se agarra el Gobierno regional de Adrián Barbón son varios. Pero dan importancia a la incidencia acumulada de casos diagnosticados de covid en 14 días y, principalmente, en 7 días. Razonan que este último parámetro es esencial al reflejar la evolución de la epidemia más próxima en el tiempo. El Principado marca así un umbral del que bajar en estos dos datos epidemiológicos en la región para permitir al sector hostelero una vuelta al funcionamiento.

La incidencia en siete días

El dato clave que maneja el Gobierno regional, que se marca como condición estrictamente necesaria descender de los 125 contagios detectados por cada cien mil habitantes para reabrir el sector hostelero. Si el día 9 la estadística regional del covid indica que se bajó de esta cifra todo apunta a que la hostelería podrá iniciar la desescalada, según el criterio del Principado.

¿Y qué marca la tendencia? Señala que desde el lunes 16 de noviembre, cuando se alcanzó un pico de 347,38 casos diagnosticados por cada cien mil habitantes, la incidencia en siete días ha ido decayendo jornada tras jornada hasta situarse en los datos comunicados ayer por el Ministerio de Sanidad en 148,71.

En los últimos siete días, la bajada media diaria de este dato ha sido de 11,3 puntos. De mantenerse este ritmo en la tendencia, Asturias conseguiría bajar de la tasa de 250, como mínimo, en tres días. Esto es, este fin de semana podría bajarse de este umbral, en el comienzo del puente de la Constitución. El Principado, sin embargo, no se plantea revisar las cifras hasta después del citado puente, el miércoles 9. Si bien, también es probable que el descenso de contagios, aunque se mantenga, modere su ritmo.ç

La incidencia en catorce días

Es el otro gran dato de incidencia de casos en el que se fijará el Principado para reabrir los bares. Si bien, con menos importancia que el de siete días. En este caso, el umbral del que habría que bajar es de una tasa de 250 positivos de covid diagnosticados por cada 100.000 habitantes.

Asturias se sitúa en una incidencia en los últimos catorce días de 376,61, según las estadísticas comunicadas ayer por el Ministerio. Este dato, al acumular cifras de más días, lleva cayendo menos tiempo que el de los siete días. En concreto, el jueves 19 de noviembre se alcanzó el pico: 649,59. Desde entonces, se ha ido moderando.

¿Y a qué ritmo? En los últimos siete días el promedio de bajada en la incidencia en 14 días ha sido de 28,8 puntos. Siempre y cuando no se aminorase ese ritmo de descenso, algo que puede ocurrir, harían falta cinco días para bajar del umbral de 250 casos por cada 100.000 habitantes. Esto es, en el tramo final del puente de la Constitución.

Otros parámetros

Según fuentes del Gobierno de Adrián Barbón, además de la incidencia acumulada se manejan, de forma accesoria, otros datos para decidir la desescalada del sector hostelero. Entre ellos, destacaría, por ejemplo, la afectación que está teniendo la enfermedad entra la población más sensible, medida con la incidencia en mayores de 68 años.

Una situación enconada

El problema es que los plazos dados están lejos de contentar a la hostelería, que ve una "falta de respeto" que no valoren permitir los bares de ninguna manera hasta el 10 de diciembre, después de un puente que resultaría clave para mitigar las altas pérdidas generadas por semanas de cierre obligado para controlar la pandemia.

Del mismo modo que al Principado no le contentó para nada la propuesta de la patronal hostelera Otea para reabrir ya terrazas e interiores de locales, manteniendo distancia de dos metros entre mesas y sin barras.

Fuentes del Principado confirman que la reapertura de la hostelería después del puente, si se aprueba, sería "muy gradual": "Se abrirían las terrazas y a ver en qué condiciones podrían abrir los interiores"

decoration

De hecho, la reapertura que se pueda decidir el miércoles 9, siempre y cuando se cumplan las condiciones epidemiológicas establecidas por Salud, será "muy gradual", aclaran fuentes del Principado. Así lo quiso dejar claro el consejero Pablo Fernández también, que habló de reevaluar la situación después del puente para "abrir terrazas y ver en qué condiciones podrían abrir los interiores". Todo indica que se podrían mantener restricciones de aforo, una cuestión que también solivianta a la hostelería, que cree que el criterio de control debe ser asegurar la distancia de dos metros entre mesas y sillas y no reducir capacidades de locales en un elevado porcentaje.

Compartir el artículo

stats