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La crecida de los ríos pone a Asturias en fase de preemergencia por inundaciones

Belmonte de Miranda ya acusa zonas anegadas y cierra el paso junto a los puentes

Los ríos asturianos, en crecida por la lluvia y el deshielo

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El Gobierno asturiano ha activado hoy, pasadas las nueve de la mañana, el Plan Especial de Protección Civil ante Inundaciones del Principado de Asturias (Planinpa) en fase de preemergencia.

Según han indicado desde el Servicio de Emergencias del Principado de Asturias (SEPA), la activación se debe al aumento del caudal de los ríos, provocado por el deshielo de la nieve caída en los últimos días, y ante la posible evolución desfavorable, sumado a las precipitaciones que se van a acumular durante la jornada. Una situación que ya preocupaba desde ayer.

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Fuerte crecida por la lluvia del Narcea y el PigüeñaMara Villamuza

Durante esta fase, desde el Centro de Coordinación de Emergencias se realizará un seguimiento continuo de los parámetros hidrológicos y se mantendrá contacto con los organismos encargados de facilitar información necesaria para seguir su evolución. En la actualidad en Belmonte de Miranda el río Pigüeña está en prealerta a pocos metros de entrar en alerta, y ya muestra inundaciones en varios puntos de la localidad. La Policía Local de Belmonte ha tenido que cortar el paso en algunos puentes y zonas más próximas a las riberas del río, como la de Aguasmestas.

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El río San Isidro, al máximo de su caudal a su paso por FelechosaLeoncio Camporro

También están en prealerta en los puntos de Quinzanas (Pravia), en Requejo (Salas), en Coria (Cangas del Narcea), en San Antolín (Ibias) y en Vallo (Navia de Suarna). En estos puntos la situación evoluciona a peor porque la crecida aún está en fase de incremento.

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El río Somiedo, a punto de desbordaseAyuntamiento de Somiedo

Esta mañana también se desbordó el Deva en Panes. El río alcanzó 4,20 metros, a las 9 de la mañana y provocó que se anegaran las vegas de Panes.

Las vegas de Panes, inundadas por el río DevaNel Melero

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En el Oriente, los 15 grados de temperatura que había a primeras horas de esta mañana en Cangas de Onís eran la prueba evidente de que el deshielo iba a complicar el caudal de los ríos. Bastaba como ejemplo la estampa que ofrecía el Picu Pierzu (1.542 metros), desde se observaban bonitas panorámicas de todo el concejo de Ponga, Amieva y Picos de Europa. El Sella tenía margen para la crecida, ya que iniciaba el día con tendencia descendente (4,62 metros) al filo de las 10.00 horas de este viernes.

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