La Junta General del Principado ha manifestado esta mañana “su total rechazo” a la decisión del Gobierno estatal de incluir el lobo en la lista de Especies Silvestres de Régimen de Protección Especial y ha acordado instar al Ejecutivo de coalición a revertirla, pero ha rechazado pedir la destitución del secretario de Estado de Medio Ambiente, el asturiano Hugo Morán, un añadido que planteaba el PP y al que se opusieron PSOE, Podemos e IU. Los grupos sí dieron su respaldo mayoritario a una propuesta de consenso transversal que llevaba la firma de cinco de ellos, todos excepto Podemos y Vox, y que considera que la decisión del Ejecutivo central, “además de vulnerar cualquier lógica en la gestión de una especie que no puede legislarse de igual forma en toda España debido a su irregular distribución geográfica y a su especial presencia en las comunidades autónomas del Noroeste, es consecuencia del voto favorable de comunidades que no tienen presencia del lobo en sus territorios, o bien en las que su presencia es meramente testimonial”.

La Junta dio así carta de naturaleza al rechazo generalizado en Asturias de una decisión que ha abierto brecha entre el Gobierno del Principado y sus compañeros de partido que rigen el Ejecutivo estatal. Vox votó a favor pese a que sus dos enmiendas para la elaboración de un plan nacional de gestión de la especie no fueron aceptadas. Podemos se opuso porque, a juicio de la diputada Nuria Rodríguez, “esto no va de defender a los ganaderos. Va de caza, de escopetas, de puros, de mediciones genitales masculinas y de a ver quién vende el jabón que lava más blanco”. Antes de acabar con un “lobo vivo, lobo protegido”, también  dijo irónicamente haberse enterado esta mañana de que “el lobo es responsable de que no haya eventos deportivos en Asturias, ha traído la pandemia y es el culpable de la muerte de Kennedy”.

La proposición aprobada incluye además un emplazamiento al Gobierno socialista del Principado para que se dirija al Ejecutivo de coalición de PSOE y Unidas Podemos  y exija “la reversión inmediata” de una decisión que genera un rechazo prácticamente unánime en la región. Resaltan los firmantes que la protección del cánido salvaje “pondría en riesgo la viabilidad de muchas explotaciones ganaderas asturianas y la pervivencia del mundo rural tal y como hoy lo conocemos, y además no respeta las competencias que las comunidades autónomas tienen en esta materia”.

Los votos de IU y PSOE, sumados a los de Podemos y haciendo pinza entre los grupos que en Madrid apoyan al Gobierno de coalición, dio al traste con la intención del PP de que la Junta pidiese además la destitución de Hugo Morán como secretario de Estado de Medio Ambiente. El diputado de IU Ovidio Zapico justificó su voto contrario lamentando, en una argumentación en parte coincidente con la del PSOE, que el debate sobre el cese “puede resquebrajar la unidad que teníamos, el mínimo común que habíamos alcanzado” en el punto anterior y el “capital político” acumulado para respaldar en esta batalla al Gobierno del Principado. La diputada socialista Alba Álvarez añadió una invitación a diferenciar entre "la política útil y de acuerdo" de la iniciativa firmada por los cinco grupos y la opción "contrapuesta" que abraza la petición de destitución de Morán. "Entiendo que quieran sacar rédito político", dijo mirando a la bancada del PP, "pero esto no va de eso".