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Un niño de 11 años, en la UCI con una infección compatible con el covid-19

El menor, que permanece estable, fue trasladado al HUCA tras una reacción inflamatoria | Temor a un repunte de los contagios en la región

Uci del Huca. | IRMA COLLÍN

Un niño gijonés de 11 años ha sido trasladado al Hospital Universitario Central de Asturias (HUCA) por presentar una reacción inflamatoria que, se sospecha, surge como consecuencia de haber padecido previamente el coronavirus. El pequeño, no obstante, y pese a haber ingresado en la UCI, se mantenía ayer estable, sin necesidad de intubación, por lo que su pronóstico por el momento resulta esperanzador. Su caso apunta a un diagnóstico similar al que causó el terrible incidente registrado a inicios de año, cuando otro pequeño, este de 12 años y también gijonés, falleció a causa de una reacción inflamatoria también vinculada a las secuelas dejadas por el covid-19.

Explican los sanitarios que complicaciones como estas son “muy infrecuentes”, pero que ya están estudiadas. Las alarmas deben activarse cuando el afectado tenga menos de 21 años y, sabiendo que ha superado previamente el coronavirus, presente una reacción inflamatoria que afecte a dos o más órganos o sistemas del cuerpo y que no pueda explicarse por ninguna otra infección vírica ni bacteriana. Esto hace que, de primeras, los sanitarios no tengan por qué sospechar que el malestar de estos pequeños tenga algo que ver con el virus. “El contacto con el covid suele ser semanas antes; lo que sucede es una reacción tardía del organismo después del contacto con el virus. Normalmente la infección se produjo en semanas previas. Es decir, que cuando les pasa esto, la PCR ya suele darle negativa”, concretan expertos en pediatría. Según fuentes consultadas por este diario, el pequeño sí presentaba anticuerpos en sangre y, hasta ahora, no ha surgido ninguna otra infección que justifique su malestar, por lo que el covid-19 es la causa más plausible. Fue trasladado desde Gijón hasta el HUCA anteayer, aunque de manera preventiva y sin que su estado sea por el momento excesivamente grave. Su ingreso en la UCI pediátrica permite un control más cercano de su evolución para poder actuar a tiempo en caso de complicaciones.

Temor a un rebrote

Mientras el número de casos de contagios diarios en Asturias sigue una tónica descendente tras la tercera ola, Salud no las tiene todas consigo. Las autoridades sanitarias constatan que el ritmo de descenso está siendo más lento del esperado y que la comunidad autónoma parece afrontar un momento de meseta. Ante esta situación, con una alta presencia de la llamada variante británica del virus, y con la mayoría de los concejos afrontando un periodo de relajación de las restricciones, el Gobierno regional teme que en unos días vuelvan a crecer los contagios. No obstante, el ritmo de vacunación puede terminar por atenuar ese ascenso, aunque en medios regionales se admite que el ritmo debería ser mayor.

El presidente del Principado, Adrián Barbón, volvió a lanzar ayer mensajes llamando a la precaución: “Ahora que muchos concejos salen del nivel 4+, no caigamos ni en la euforia ni en comportamientos fuera de lugar. La incidencia sigue muy alta en Asturias. Cualquier exceso significará un rebrote”, afirmó.

En medios regionales se resalta que de volver a iniciarse un ascenso de contagios se volverán a aplicar las medidas del llamado “nivel 4 plus”, que implicarán la vuelta a los cierres perimetrales o las limitaciones en la hostelería, más allá de las que ya se aplican en el conjunto de la región.

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