El ministro de Agricultura, Pesca y Alimentación, Luis Planas, avanzó ayer que 2021 será un “buen año” para las exportaciones agroalimentarias españolas tras registrar unas ventas al exterior de 55.000 millones de euros, según los últimos datos de mayo.

“En una situación difícil con la pandemia, hemos sido capaces de mantener nuestra presencia exterior y aumentarla de forma significativa, hasta superar los 53.400 millones de euros, lo que supone un 4,1% más en 2020. Exportamos más de la mitad de lo que producimos en España y ese dato es espectacular”, aseguró Planas durante la presentación de la herramienta interactiva para la consulta combinada de datos de comercio exterior agroalimentario y pesquero, elaborada por el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación.

El titular del ramo ha recordado cómo se han ido elevando las ventas del sector agroalimentario en mercados internacionales. “En los 90, la balanza comercial española era negativa, pero se fue equilibrando al comienzo de este siglo y entre 2010 y 2021 se ha duplicado. Si en 2010 era de 28.000 millones de euros, a finales de 2020 alcanzaba los 54.000 millones de euros. Además, el peso de las exportaciones ha aumentado significativamente: si hace 10 años era el 15%, ahora supone el 20%”, ha recalcado.

Planas destacó la importancia de abrir nuevos mercados para elevar las exportaciones de productos como el vino, el aceite, el porcino o los cítricos. Respecto a las exportaciones españolas, el titular de Agricultura ha calificado de “noticia positiva” la suspensión provisional de cinco años de aranceles impuestos por Estados Unidos. “Nos queda un tema que nos es próximo como son los aranceles a la aceituna negra, que esperamos una resolución en las próximas semanas o meses de la OMC”, ha señalado.

Planas añadió que “el sector agroalimentario es clave para España, en este proceso que estamos viviendo de pandemia y de recuperación del país. Somos la cuarta potencia agroalimentaria en Europa y la octava del mundo en exportaciones. Además de ser el mayor suministrador de frutas y hortalizas frescas de Europa”. El sector supone el 11% del PIB, genera un total de 2,8 millones de empleos y es el “eje vertebral” de la España rural.