Debo comenzar diciendo que soy dueña de un perro, por eso estoy leyendo estos días con gran estupor no sólo la posibilidad de crear por parte del Ayuntamiento de Oviedo una patrulla canina secreta sino también la idea de realizar extracciones de ADN para ver quién es el dueño que ha dejado el "recao" de su perro en la calle o en el parque.

No justifico para nada la gente que deja los excrementos de sus mascotas en ninguna zona urbana, porque, y lo digo sinceramente, es una "marranada", y lo sé, y los dueños más "marranos" aún, porque luego por esta gentuza pagamos todos los que disfrutamos de nuestros perros, de nuestras salidas por la ciudad con ellos y de su compañía. Y no es justo, pero sé que mis argumentos están muy manidos, que da igual diga lo que diga.

Por eso voy a centrarme en lo que se supone que es una conducta incívica, nos queda claro y sabemos todos que sí, que dejar las cacas de los perros sin recoger es una, y que debe estar penado también... Pero ¿solamente los que tenemos mascotas somos potencialmente peligrosos ciudadanos de cometer éstas? Aquí es donde voy a poner un supuesto real que me ha pasado no una vez ni dos, sino unas cuantas veces, y no en una calle en concreta de Oviedo ni en dos, sino también en varias... ¿Qué pasa cuando yo, una vez recogida la caca del perro en su correspondiente bolsita, quiero meterla en una papelera y, ¡oh! sorpresa, me encuentro con que está hasta arriba de bolsas de basura? ¿Qué pasa con esa gente que no quiere tener la basura en su casa y la mete con alevosía "a calzador" en una papelera urbana? A veces con la desfachatez de ser botellas de plástico o papeles que no lleva ni a reciclar. ¿Puede ocurrir que alguna de esas personas que tanto echan "pestes" contra los perros y sus cacas sean ellas capaces de hacer una guarrada igual o mayor? Probablemente sí o no, pero esto es a todas luces e incuestionable otra conducta incívica.

Conclusión: que si las cabezas pensantes del Consistorio ovetense quieren y deciden en el Pleno crear esa patrulla canina secreta, adelante, que a mí no me van a pillar, pero puestos a crear un CSI Oviedo, acuérdense también de nombrar un Grissom que persiga a la gente que cree que está en el Medievo y que las calle son un vertedero, para ver si entre todos/as somos capaces de vivir en el mayor civismo posible.