Avilés comienza la cuenta atrás para el inicio del Antroxu. Y la preocupación es máxima desde la Cofradía del Santo Entierro de la Sardina. Las noticias llegadas desde Wuhan (China) han encendido las alarmas en la peña avilesina, temerosos porque el "coronavirus" impida la festividad. "Según la prospección, el 97,2 por ciento de los trajes del Antroxu son chinos, así que los hemos quemado todos", dicen con sorna desde la cofradía, que ayer protegió a la réplica de su musa, "La Monstrua", para que no se vea contagiada y llegue en plenitud de condiciones al comienzo de los actos.

La Cofradía del Santo Entierro de la Sardina ha pasado la cuarentena y han recibido el alta justo a tiempo, pero avisan de que "el virus puede interferir hasta en el Descenso de Galiana". Para ello se han puesto manos a la obra, provistos de mascarillas y guantes para "construir una patera y escapar por la ría". También aprovecharon la ocasión para lanzar su revista 'La Parrochina' dedicada a los principales líderes políticos. Como muestra un beso entre Pedro Sánchez y Pablo Iglesias o el "corona-virus borbonicus como una pandemia de la progresía".

Con el Antroxu a la vuelta de la esquina, el Centro Social de Llaranes preparó durante la mañana de ayer adornos carnavalescos con materiales reciclados, Cerca de una decena de niños utilizaron papel de periódico, cartulinas reutilizadas, carteles o lana para hacer diademas y antifaces. Por otra parte, ayer se celebró en Los Campos la fiesta del Antroxu organizada por la Asociación de Vecinos "Xente Nuevo".