El cantante Pedro Guerra y el poeta asturiano Ángel González son los creadores de "La palabra en el aire", un disco que grabaron hace más de veinte años en el teatro Campoamor y que este sábado revive (20.00 horas, en el auditorio de la Casa de Cultura) dentro de la programación de la segunda edición del festival Fifty-Fifty, que echó a andar ayer mismo. "Yo sólo, con una guitarra", proclamó el músico canario al otro lado del teléfono. "La poesía de González lleva dentro su musicalidad: sólo hay que encontrarla", añadió el cantautor canario.
Contó el músico que fue el periodista Juan Cruz, adjunto a la presidencia del grupo Prensa Ibérica, editor de LA NUEVA ESPAÑA, quien facilitó el encuentro entre el músico y el poeta. "Cuando estaba aún en Canarias lo leía mucho, ya en Madrid le leí más profundamente", admitió Guerra. "Un día decidí musicalizar algunos de sus poemas, se lo presenté y los dos construimos ‘La palabra en el aire’, que fue el título que eligió él mismo", señaló Guerra. "Las palabras cantadas, decía, son las que mejor viajan por el aire", añadió a continuación.
Así empezaron a trabajar: por el deseo de colaborar juntos y nada más, por el deseo de hacer conciertos. "El disco vino después. Lo que hicimos fueron unos conciertos: él recitaba y yo cantaba. Uno de aquellos conciertos, el del Campoamor, se grabó. Y ahí está su voz. La canciones las mezclé después y así fuimos andando", continuó su relato.
El disco es de 2003. "Luego lo volví a revitalizar en 2018, cuando se cumplieron los primeros diez años de la muerte de Ángel González". Y hasta ahora, hasta que los del Fifty-Fifty se pusieron en contacto con Guerra para proponer una nueva versión del espectáculo.
Guerra recordó para este periódico la ilusión que despertó en el poeta salir al escenario con el músico. "Estaba acostumbrado a los ambientes literarios, a recitales de poesía entre aficionados, cosas pequeñas. Salir al escenario conmigo fue algo mayor. La edad del público bajaba. En todo caso, la música no era una cosa ajena a sus versos. Había preparado una antología sobre los vínculos de la música en los versos", recalcó. "Vivió todo aquello –y yo también– como una experiencia tremenda", apostilló.
El cantante, cuando se le pregunta por sus influencias, responde que las musicales las tiene "claras". Cuando se ahonda en "la parte escrita" no lo tiene tan claro. "Pero la presencia de Ángel González en mis versos es evidente". Lo que más le llama la atención de la obra del asturiano es "ese hablar claro, esa forma de decir las cosas con esa sencillez y, pese a todo, no componer al final un simple poema". El músico canario lo volverá a demostrar el sábado.
