El geriátrico del ERA de Piedras Blancas lleva 8 años abierto y aún tiene licencia provisional

La asociación de familiares de residentes critica la falta de transporte para ir a citas médicas y de actividades terapéuticas y ocupacionales

La residencia geriátrica El Villar. | Ricardo Solís

La residencia geriátrica El Villar. | Ricardo Solís / Francisco L. Jiménez

Francisco L. Jiménez

Francisco L. Jiménez

La asociación de familiares de residentes en el geriátrico público de El Villar (Piedras Blancas) ha hecho público su malestar con la gerencia y los responsables del ERA (la institución de la que depende el equipamiento) en relación a la licencia de apertura del centro, "ya que lleva ocho años abierto y aún funciona con una licencia provisional, lo que conlleva, entre otras cosas, el deterioro del entorno: accesos, zonas ajardinadas, papeleras..."

Los familiares agrupados en la asociación aseguran que tanto ellos mismos como la dirección del centro han expuesto la situación "en numerosas ocasiones en los últimos años en reuniones con la gerencia del ERA y se ha hecho hincapié en la necesidad de hacer las obras oportunas para obtener la licencia definitiva". Pero, añaden, "la única respuesta siempre ha sido dar buenas palabras y hacer falsas promesas". Por todo esto, y porque ocho años de precariedad les parecen "excesivos", el colectivo renueva su exigencia y sopesa medidas de presión.

No es el único asunto que preocupa a los familiares de residentes en El Villar. Otro quebradero de cabeza es el transporte: "Cuando un residente ha de ir a alguna cita médica tiene que buscarse la vida y pagarse un taxi –el cual según la gerencia abonará el ERA– pero desde el centro nos comunican que no hay constancia de cómo hacer tal reembolso". Esta falta de transporte está relacionada, al parecer, con la no contratación del servicio en tiempo y forma.

Otro tema que genera ampollas es la contratación de ciertas actividades: "Antes de las restricciones obligadas por la pandemia de covid, los residentes disfrutaban de una serie de actividades como musicoterapia, terapia ocupacional, etcétera que nunca han vuelto a programarse. Y no hay derecho", expresa el colectivo en un comunicado.

La asociación de familiares del ERA de El Villar consiguió hace dos años a través de la Obra Social de Fundación La Caixa una subvención con lo cual se hizo un taller de memoria impartido por una psicóloga durante meses y el año pasado se consiguió otro de musicoterapia que terminó en junio de este año: "Consideramos que ya es hora de que el ERA reinicie todas esas actividades, no solo en nuestro centro, sino en todos los de la red, ya que nos consta que sucede y reclaman lo mismo todos".

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