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Una seña de identidad

El nuevo coordinador de la Escuela de Mareo, Juan Luna, que llegó al cargo a finales de noviembre, quiere establecer unas bases fijas para ligarlas a la estructura del Sporting

Una seña de identidad

Mareo está ligado históricamente a una serie de valores intocables. Y en esa tesitura, la formación deportiva y personal de cada jugador, es primordial. Más aún cuando uno se refiere a la Escuela de Fútbol de Mareo. Por ello, el nuevo coordinador Juan Luna -que a su vez dirige a uno de los equipos infantiles del Sporting-, que llegó al cargo a finales de noviembre para suplir a David Nicieza, que estuvo durante las últimas cinco temporadas en el cargo, quiere asentar unas bases que se mantengan intocables en el futuro, pase quien pase por la Escuela de Fútbol de Mareo, y siempre con el visto bueno por parte del Sporting.

Todo ello, considerando que "los ideales y los objetivos no estuvieron muy definidos". "Queremos que cualquier entrenador o padre vea cuales son nuestros objetivos, nuestros principios, nuestra idea y nuestros fines y, que todo ello, quede plasmado para siempre sin importar el coordinador que esté al frente", asegura con firmeza.

"Estos primeros meses han sido para reorganizar un poco todo, potenciar los puntos fuertes que teníamos y solucionar los problemas que podían surgir, ya que considero que Mareo tiene un gran potencial que ofrecer, hay detalles que impulsar, vamos a presentar novedades y para ello hemos puesto nuestro esfuerzo para enriquecernos", analiza el nuevo coordinador. Este año, la Escuela de Fútbol de Mareo cuenta con una totalidad de trece equipos y, ya anuncia, que la próxima campaña incrementará su parcela con un equipo cadete.

Juan Luna, que cuenta con la ayuda de Kevin de León, ya se ha puesto manos a la obra para que empiecen a llegar los primeros frutos a su labor. Y para ello ha puesto en marcha la maquinaria de ideas que favorezcan el desarrollo deportivo y personal de cada jugador que milita en la Escuela. Desde un área de tecnificación específico por puestos, hasta una pequeña escuela dirigida a los padres en la que se darán charlas relacionadas con el deporte y la vida, así como una gran cercanía por parte de los futbolistas del primer equipo del Sporting, que se han dejado ver con notoriedad junto a los jóvenes jugadores que sueñan con alcanzar algún día a sus ídolos.

Pero todo ello sin olvidar un detalle mayúsculo. "Somos una escuela y tenemos que asemejarnos mucho a ello", comenta Juan Luna. El coordinador asegura además que en ese aspecto realizará una fiesta fin de curso y cada jugador contará con un boletín de notas en el que se evalúen los aspectos técnicos y tácticos de cada uno de ellos y siempre sin olvidar el aspecto humano y los valores que requieren para formar a las personas de forma educativa. "La Escuela tiene que fomentar desde las edades tempranas la identidad con los colores rojiblancos, aprender y jugar, pero siempre siendo un instrumento educativo", analiza.

Mareo, un marco ideal

Todo ello, alrededor de un marco como Mareo y de unas instalaciones que para Luna "son de lo mejor que hay en España". Juan Luna es consciente de sus palabras. Vive en primera persona el sentir de los jóvenes jugadores que se acercan al campus de fútbol cada verano y que dejan constancia de sus gratas impresiones mientras entrenan y se divierten junto al balón en los impecables campos de Mareo. "Estas instalaciones tienen una gran fama", asegura. A todo ello, el coordinador suma una terna de técnicos que "están preparados y con gran experiencia, lo cual son dos de nuestros pilares fundamentales", dejando patente la gran capacidad formativa con los que cuenta la Escuela de Fútbol.

La llegada de Juan Luna al frente de la coordinación deportiva ha supuesto un soplo de aire fresco, con las ideas bien claras, marcadas y en fase de asentamiento a la espera de que la Escuela de Fútbol de Mareo mantenga una identidad que no cambie su ritmo en el futuro para mantener con firmeza los valores en el fútbol y en la vida.

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