El "Concursu Indumentaria y el Día’l traxe’l país", "Moscón de Oro" local 2023

La Asociación Amigos de Grado distingue a un certamen que busca promover la recuperación de tradiciones y su divulgación entre las nuevas generaciones

Miembros de la Asociación Amigos de Grado, con el jurado

Miembros de la Asociación Amigos de Grado, con el jurado

L. P.

El "Concursu Indumentaria y el Día’l traxe’l país" acaba de ser galardonado con el "Moscón de Oro" local de este año, la prestigiosa distinción que concede la Asociación Amigos de Grado y que se entrega con gran solemnidad en la Capilla de los Dolores de la capital moscona cada mes de octubre.

Con este premio, el jurado que ha tomado la decisión rinde homenaje a la tradición y al afán divulgativo a través de unas jornadas que cada año desde 2016 llenan Grado de color, artesanía y buen hacer para mostrar vistosas creaciones textiles, documentadas a fondo y creadas con mimo y lujo de detalles. El concurso y las jornadas son una creación intelectual del empresario y diseñador gráfico Alberto Suárez Fernández (Oviedo, 1971). La primera edición se celebró en septiembre de 2016, nacida de la iniciativa empresarial privada, y producida gracias al patrocinio del Ayuntamiento de Grado y de la Caja Rural de Asturias. El certamen se lleva celebrando desde entonces, sólo interrumpido en 2020 por la pandemia.

El evento está dedicado a la indumentaria tradicional asturiana o «traxe’l país», a través de un formato en el que personas a título individual optan en dos categorías, masculina y femenina, a tres distinciones que concede un jurado, en función de unas bases redactadas por la organización. En la mañana del último domingo de septiembre, la villa se llena de trajes de paño, estameña, terciopelo, lino y seda para participar en un concurso que pone la lupa en la calidad y rigor de las vestimentas, que han de estar basadas en la información obtenida de las fuentes de conocimiento que acreditan los elementos de un buen traje: la pintura, dibujos, grabados, fotografías, descripciones literarias o notariales del siglo XIX, y de las piezas antiguas que se documentaron o se conservan como modelo para la recuperación de los trajes en la actualidad. Y todo ello con el afán de "promover la puesta en valor de la indumentaria tradicional asturiana, para difundir su correcto uso, para promover su estudio y conocimiento", tal y como consta en el dossier de su candidatura.

Además han hecho valer el hecho de que el certamen se convierte en "una fiesta asturiana única, un encuentro en el que la música y el baile tradicional empapa toda la villa, desarrollando un formato de baile libre y de danzas que llena la plaza del General Ponte, abierto a la participación de todo el mundo, con la misma filosofía de los bailes de nuestros antepasados". Y a todo ello se une el éxito de público y asistencia, con participantes de Llanes, Ribadesella, Piloña, Nava, Gijón, Carreño, Gozón, Avilés, Oviedo, Llanera, Siero, Candamo, Las Regueras, Mieres, Langreo, Lena, Santo Adriano, Proaza, Cangas del Narcea, Tapia y Navia, "que dedican el día completo de descanso a los actos programados, comiendo en los numerosos bares y restaurantes de Grado".

Por todo ello, y por el impulso que supone para labores ya abandonadas y que en otro tiempo tuvieron gran importancia en la economía local, el jurado ha decidido que el Moscón de Oro de esta edición vaya bien elegante, revestido de con la belleza de los usos tradicionales, derrochando la elegancia de lo bien hecho, de lo que permanece para generaciones futuras.