El Administrador de Infraestructuras Ferroviarias (Adif) está llevando a cabo las gestiones necesarias para que se suscriba "en el menor plazo posible" el convenio que permitirá reanudar las obras del soterramiento de las vías de la antigua Feve en Langreo aunque no ofrece una estimación más concreta. Fuentes del organismo ferroviario confirman que se están llevando a cabo "todos los trámites legales y administrativos preceptivos, tanto internos como externos" una vez se produjo el acuerdo con el Principado y el Ayuntamiento de Langreo para modificar el documento.
Este convenio es necesario para que el Adif ejecute la superestructura ferroviaria en el túnel, la instalación de las vías, la catenaria y la señalización. El Consistorio ya ha dado su visto bueno al borrador del convenio. Falta la luz verde del órgano de gobierno del Adif para que posteriormente sea aprobado por el Consejo de Gobierno del Principado y remitido al Consejo de Ministros. Entonces, las tres administraciones suscribirán el acuerdo, desbloqueando la obra.
El convenio tiene que ser modificado ya que la encomienda del proyecto la tenía hasta ahora el Principado, que fue quien ejecutó la obra civil. El Adif, organismo dependiente del Ministerio de Fomento, acometerá la segunda fase de las obras. La última de ellas, la urbanización de los terrenos liberados una vez empiecen a circular los trenes por el túnel, corresponde al Principado. El borrador del convenio incluye que para la instalación de la superestructura ferroviaria en el túnel se precisan 40 millones de euros, el doble de lo previsto inicialmente ya que se incluirán actuaciones de mejora en el tramo que va desde Sama a Laviana. Estos trabajos en la línea de Feve del valle incrementan el coste de la obra que ejecutará el Adif, desde los 20,5 millones consignados en un principio.
Urbanización
La obra de urbanización tendrá un presupuesto de 9,9 millones de euros. Esta cuantía se financiará con cargo a los fondos mineros sin gastar del anterior Plan Minero, tras acordarlo el Estado y el Gobierno regional sobre un listado previo sobre el que se pidió opinión previa a los ayuntamientos. El Gobierno central aporta un 75 por ciento de la inversión global, mientras que el resto será desembolsado por el Principado.
El convenio fue modificado tras las quejas sobre el borrador inicial por parte del Ayuntamiento de Langreo, que pidió que fuese el organismo ferroviario dependiente del Ministerio de Fomento el que se hiciese cargo del mantenimiento de la capa de impermeabilización del falso túnel. Esta tarea había sido asignada al Consistorio en el documento inicial. Con este cambio, la segunda fase de la obra quedaría desbloqueada.
El mantenimiento de la capa de impermeabilización del túnel era el único punto de divergencia que impedía que el Ayuntamiento firmase el convenio necesario para que el Adif ejecute las obras de instalación de las vías, la catenaria y la señalización. El Ayuntamiento dio luz verde de forma unánime al convenio, que ya remitió al Adif. Una vez suscrito comenzaría el plazo de contratación de las obras, que el organismo ferroviario estima que podría durar alrededor de ocho o nueve meses.
