El aumento de los costes energéticos obliga al Ayuntamiento de Langreo a consignar cerca de 650.000 euros más de los previstos. El gasto en gas, luz y combustibles ya había obligado a reservar una partida de los ahorros municipales del pasado año. Cuatro meses después de que el Pleno lo aprobase el Consistorio tiene que recurrir a una nueva modificación de crédito ya que la cuantía aprobada no llega.
La cantidad destinada ahora para el suministro de gas alcanza los 110.000 euros, con 60.000 para edificios educativos, aseguró la concejala de Hacienda, Patricia Fernández Sanguino. La partida destinada a carburantes aumenta en 25.000 euros. "A esto se suman los 511.000 euros reservados del remanente municipal", comentó la edil.
Dentro de listado de inversiones aprobadas para financiar con los ahorros se incluía también una partida destinada al incremento en los presupuestos de obras municipales por el Ayuntamiento debido al incremento del coste de las materias primas. Está reservada para empresas que tuvieran obras en ejecución, adjudicación o que estuvieran licitadas en Langreo en la fecha que entró en vigor el decreto que da luz verde al mecanismo excepcional de aumento de los presupuestos en los contratos públicos.
La concejala de Hacienda indicó que con la cuantía consignada en el remanente para los gastos energéticos "no se llega y recurrimos a una modificación de crédito". Calcula que con esta cantidad extra se cubrirán las necesidades de suministro de los edificios y servicios municipales hasta final de año.
De cara al próximo ejercicio, las estimaciones se incluirán en el nuevo presupuesto municipal, que aún no ha sido aprobado. La modificación de crédito fue analizada en la Comisión de Hacienda y necesita el visto bueno del Pleno municipal. Junto a esta partida se incluyen otras, que suman 393.736 euros.
El pasado mes se dio el primer paso para la aprobación de los presupuestos con el debate sobre los impuestos municipales. Se acordó, por unanimidad, una bonificación del 50% en el IBI (Impuesto sobre Bienes Inmuebles) para aquellos vecinos que instalen placas solares en sus edificios. La propuesta trasladada en la Comisión de Hacienda por el gobierno local y Ciudadanos fijaba un 30% de reducción, que se amplió al 50% tras plantearlo el PP. En el Pleno las cuatro formaciones (PSOE, Unidas por Llangréu, PP y Cs) dieron luz verde a la medida.
El pacto alcanzado por el ejecutivo local y la formación naranja fijó también la congelación de los precios y las tasas públicos y del IBI. El PP había propuesto una reducción del 4% en el tipo del IBI, pero no salió adelante. Fue planteada como una enmienda de adición a la propuesta de la Comisión y rechazada por el gobierno socialista y Cs (que suman once concejales) frente a los votos de Unidas por Llangréu y el PP (diez).
