El Club Bádminton Oviedo se la juega: la salvación, a una carta

El equipo carbayón disputa mañana, a partir de las 10.00, el partido por la permanencia en la máxima categoría en casa ante el Alicante

Marcos García, en el último partido del Club Bádminton Oviedo. |

Marcos García, en el último partido del Club Bádminton Oviedo. | / Jaime Benjamín / CBO

Antonio Lorca

Antonio Lorca

El Club Bádminton de Oviedo ha sido dos veces campeón de liga en la máxima categoría de este deporte en España, ha ocupado y ocupa un lugar destacado en el panorama nacional de este deporte y ahora, tras una temporada complicado, con muchos contratiempos, con lesiones y afrontando un relevo generacional, se va a jugar la permanencia en la máxima competición de este deporte en España a un partido, el que le enfrenta mañana en el Corredoria Arena, a partir de las 10.00 horas, al Bádminton Alicante Intercity.

El director técnico del club, César González, reconoce que para ellos se trata de "una final": "En este caso, una final por la permanencia, eso indica lo importante que es para nosotros". El hecho de que esta temporada estén luchando por la permanencia se debe "a dos factores": "Primero hay un cambio de ciclo generacional, hemos afrontado la retirada de gente como Alberto Zapico, y después bajas como las de Pelayo Pinto, que se fue a Italia y al final no pudo ayudarnos, la baja de Kristina Sotomayor, que se ha quedado embarazada, se han juntado varias cosas". Unos problemas que también tienen su lado positivo: "Subió Marcos García del filial y estamos súper contentos de cómo lo ha hecho, Amaya y Vicente han tenido también una gran evolución, lo que nos permite aspirar a tener en un futuro un grupo fuerte y potente".

Al que le toca preparar más al detalle el partido es al entrenador Fran Dacal, entrenador del CBO, que asegura que el partido estará "nivelado y disputado": "Ellos también se juegan mucho". Una de las grandes ventajas será la de jugar en casa: "Es muy importante para nosotros, en bádminton son determinantes cosas que podrían parecer pequeñas en otros deportes, el volante no va igual de rápido en un sitio o en otro". De lo que no es partidario es a cambiar muchas cosas por la importancia del partido: "No soy partidario de cambiar los protocolos, puede que dediquemos un poco más de tiempo del habitual a preparar algunos partidos, pero en general mantenemos una continuidad".

Al que le va a tocar saltar a la pista es al joven Marcos García, de 18 años, especialista en dobles del Bádminton Oviedo, aunque esta temporada también le ha tocado jugar alguna vez en individuales. "Tengo ganas de jugar ya, de ver cómo se da todo y de conseguir la permanencia, espero que pueda venir gente al partido, es una motivación jugar en casa", explica. Canterano de toda la vida del club, Marcos asegura que le gusta esta tensión: "Yo, con ayuda, he conseguido gestionar esos nervios para que sean algo positivo".

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