Constituido el Instituto de Mediación para solventar discrepancias societarias

Participan Cámara de Oviedo y los colegios de Abogados de Oviedo y Economistas de Asturias

Momento de la firma de la escritura de constitución del nuevo Instituto de Mediación. | Luisma Murias

Momento de la firma de la escritura de constitución del nuevo Instituto de Mediación. | Luisma Murias / J. Cuartas

Cámara de Comercio de Oviedo, Colegio de Abogados de Oviedo y Colegio de Economistas de Asturias constituyeron ayer la sociedad civil Instituto de Mediación del Principado de Asturias (IMPA), que desde ahora integrará los registros y servicios de mediación en los ámbitos societario y patrimonial con los que ya contaban por su cuenta cada una de las entidades partícipes en la nueva entidad.

Con sede en las instalaciones de la Cámara de Comercio, Industria y Navegación de Oviedo, el IMPA mediará en discrepancias o conflictos que surjan en el estricto ámbito mercantil, bien entre empresas, socios de una misma sociedad o en casos de arrendamientos y otros. El Instituto no intervendrá en asuntos laborales –para los que ya existe el Servicio Asturiano de Solución Extrajudicial de Conflictos (Sasec)– ni en los de índole personal y familiar.

El ámbito de actuación del IMPA será el conjunto de la comunidad autónoma y con carácter universal y voluntario, incluidos aquellos casos en los que se diriman cuestiones que afecten a entidades no integradas en la Cámara de Oviedo.

Tras la firma ayer de la escritura de constitución, el IMPA se considera ya en actividad aun cuando está pendiente de la reducción de su reglamento, procedimiento de designación de mediadores y otros aspectos de la operativa.

Cada uno de los tres promotores de la sociedad ha aportado 3.000 euros como inyección de capital, así como sus respectivos registros de mediadores. La Cámara ovetense pone a su vez las instalaciones y el Colegio de Economistas de Asturias ha facilitado la razón social de la nueva entidad.

La mediación son mecanismos de arbitraje que contribuyen a solventar conflictos y discrepancias sin recurrir a la vía judicial, facilitando vías alternativas de entendimiento y reduciendo la litigiosidad y los costes.

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